Me habían soplado que en un camino del bosque, el Paso de
Borgo, habían muchas setas, sobre todo
níscalos (Lactarius deliciosus) Pregunto a unos cazadores donde empieza aquel
camino. “Justo donde se recortan las siluetas de dos olmos allí en el
horizonte, en el Monte de los dos olmos.”
Cuando llego a la cima me recibe una voz gutural: “Aquí no
hay ningún comienzo, sino uno de los finales.”
Pego un salto. En el camino no hay dos olmos sino un hombre y una mujer
clavados en el suelo hasta las rodillas. “Hola”, me dice ella. Al descubrir mi
cara de estupor el hombre clavado en el suelo
me aconseja:
-Más le vale que se tranquilice y que se haga un hueco bien
resguardado antes de que se ponga el sol, que luego todo son prisas.
No sé muy bien porqué pero me pongo a excavar un hoyo en el
suelo. Ya me lo decía mi madre: “Si fulanito te dice que te tires de un puente
tú vas y te tiras. No tienes remedio.”
Me introduzco en el agujero hasta las rodillas y quedo
frente al hombre y la mujer. Ella me dedica una sonrisa. Sus ojos brillan, las
pecas exhibidas en sus turgentes pechos
bailan y sus redondas mejillas llamean.
-Somos una pareja abierta –me aclara.
El tiempo pasa mientras el bosque se ruboriza con las hojas
otoñales. Llanega –así se llama la mujer- tiene una desbordante imaginación
para el sexo… aunque en el actualmente
conocido como Monte de los tres olmos aún no he visto ni una sola seta.
No se puede tener todo.
FIN
La semana pasada quedé con una amiga y su nueva pareja en un bar de tapas. El pobre no conocía los especaculares efectos que me provocan los chistos cortos y malos:
Ya avisé que era muy malo.Bueno, y vuelvo con el tema de las setas que ya es plena temporada. Hoy me he preparado este plato:
TERNERA CON SETAS
Sofreír carne de ternera cortada en dados para estofar. Retirar del fuego y sazonar con sal y pimienta.
En el mismo aceite freír zanahorias, cebolla y patatas cortadas a taquitos.
Limpiar las setas (yo he usado níscalos, pero también se puede hacer este plato con setas en conserva) y añadirlas al sofrito. Incorporar la carne, 1 hoja de laurel, perejil picado y 1/4 de litro de vino tinto.
Tapar la cazuela y dejar cocer media hora con el fuego al mínimo.
Parecía dinero fácil, pero todo formaba parte de un plan tramado por setas alienígenas y carnívoras para adueñarse de nuestro planeta...
¡Sigan mi consejo! Déjense guiar por la voz del bosque y salgan a buscar setas.