Muchas gracias, de corazón, por haber dado vida al blog con
vuestros comentarios, opiniones o
simplemente pasando por aquí... y muy especialmente por tantas
experiencias que me habéis dejado compartir. Gracias a todas y todos.
Y ahora paso a hablar de mi parche:
El año pasado rodé
con Iván Valencia (derecha) el corto Caja negra. Lo cuento aquí:
miquel-zueras.blogspot.com/2016/12/se-prohibe-la-entrada-jekyll.html
Iván ha querido contar conmigo para su próximo cortometraje
S.P. (Shore Patrol) que recrea la Barcelona de cuando recalaba la VI flota
americana. Las siglas S.P. también son por Salt and Pepper, como llamaban los
marineros a las parejas de vigilancia siempre formadas por un marinero blanco y
otro de raza negra.
Quedé con Iván y Anna, la maquilladora, en que pasarían por
mi casa para entregarme el uniforme, un bigote falso y hacerme unas fotos de
prueba. Ya avisé al director que no se asustara al verme, me había salido un
herpes zóster y el lado izquierdo de mi cara parecía el del hermano feo de el
Hombre Elefante. Encima, un ojo me dolía horrores.
Después de probarme el uniforme y hacerme esta foto
(Gracias, Anna por tu trabajo de "reparación") Iván, que ya había
pasado por esta experiencia, me entregó un parche que había tomado de atrezzo.
"Toma, procura proteger siempre ese ojo de la luz. Funcionará". Vaya
si funcionó. Parche para ir por casa y gafas oscuras por la calle. Pronto mi
ojo izquierdo ya estaba mejor.
-Hemos de rodar una
escena en un bar -me dijo Iván-. ¿Conoces algún tugurio inmundo?
Enseguida pensé en el bar de mi amigo Ángel que me ha
servido de inspiración para unas cuantas entradas en mi blog. Le dije: "El
director quiere un bar de aspecto atemporal (me callé lo de tugurio inmundo por
tacto) rodaremos un par de horas y te pagarán cien euros. ¿Vale?"
Ángel aceptó, pero la instalación eléctrica del bar estaba
en muy mal estado. Después de hacer saltar los plomos tres veces y poner de los
nervios a Ángel decidimos buscarnos otro bar atemporal. Aún estamos en ello...
Y como estoy de aniversario no puede faltar una receta:
POLLO CON MIEL Y LIMÓN
Así me quedó esta mañana.
Frotar enérgicamente
el pollo con aceite, sal y pimienta e introducir en su interior medio limón y
unas hierbas (tomillo o laurel) Hornear el pollo a 180º.
Cuando se empiece a dorar, regar con vino blanco. Es muy
importante rociar el pollo de vez en cuando con el jugo que va soltando al
cocerse.
Después de unos 45m. recoger en un cazo un poco de jugo de
la cocción, 1 cucharada de miel y el zumo de 1/2 limón. Remover, rociar el
pollo con la mezcla y dejarlo gratinar 2m. antes de servir. Así queda más
dorado y con un sabor agridulce al estilo oriental.
¡Abrazos y besos a todos!