No consiguieron la celebridad del toro de Osborne o la botella de Tío Pepe pero han formado parte de nuestra vida y es inevitable cogerles cariño:
POLIL
Mi preferido. De una gran fuerza visual. Siempre me ha parecido una buena imagen para una portada de El hombre invisible de H.G.Wells.
NETOL
Genial e inquietante. Un mayordomo batracio que no desentonaría en una casa del lovecraftiano pueblo de Insmouth. A los niños de mi generación cuando hacíamos muecas tirándonos de las comisuras de la boca nos decían. "¡Nene, que te quedarás como el de Netol!".
NITRATO DE CHILE
Es como el cartel de un western, me encanta. Lo tomé prestado para una carta de cócteles. Aún quedan en algunos pueblos, en casas situadas estratégicamente cerca de las carreteras.
Y AHORA, EL MÍO
Mi pollito para este asador fue recompensado con un Menú Tó-Riko: pollo a lást, canelones y croquetas; mi banquete dominical preferido cuando era niño. Este pollo tan veraniego tampoco está mal:
POLLO A LA SANGRIA
En una jarra mezclar el vino tinto con trozos de naranja, manzana, melocotón y el zumo de un limón. Echar una parte en un bol o plato hondo y poner a macerar el pollo cortado en octavos al menos una hora.
Mientras el aceite se calienta en la cazuela, secar los trozos de pollo con un papel de cocina. Freírlos y cuando tomen color sazonar con sal y pimienta. Añadir a la cazuela las frutas y el vino, tapar y dejarlo cocer con el fuego al mínimo durante media hora.
Este pollo a la sangría queda muy bien con arroz blanco salteado y acompañado de una jarra de sangría bien fresca, naturalmente.
viernes, 29 de junio de 2012
lunes, 25 de junio de 2012
NIEBLA AFRODISÍACA
En mi entrada Un relato erótico y... del pasado 10 de diciembre publiqué Tres espectadores, un cuento que ganó el premio de relatos eróticos de la revista Sexologies. Vuelvo a concursar con esta breve historia a ver si hay suerte:
SOMBRAS Y SILUETAS (RELATO)
SOMBRAS Y SILUETAS (RELATO)
La Ciudad se escondía bajo la humedad delirante de una
niebla espesa y obstinada. Al llegar la
noche empeoró la situación. Todo parecía
abandonado a la viscosidad que empapaba piedras y cuerpos. Las farolas,
fantasmales y desprovistas de base, no ayudaban a orientarse. No había cielo,
ni sol, ni horizonte, sólo una niebla amarillenta que se estaba volviendo
púrpura.
Juno y Diana se movían lentamente por los callejones cogidos
del brazo. La visibilidad era prácticamente nula.
-No sé como consigues orientarte –dijo Diana que no conocía
el barrio.
-Muy fácil: cuento las esquinas.
El sistema era primitivo pero eficaz. Avanzaban ahora
despreocupadamente hasta que otra pareja surgió de repente de una esquina. Juno
sintió que Diana era arrancada de su brazo mientras él mismo era proyectado
hacia atrás. Vieron formas confusas que intentaban conservar el equilibrio y se
sucedieron las exclamaciones:
-¡Perdón!
-¡Maldita niebla!
-¿Os habéis hecho daño?
-No, sólo el susto… ¡Já, já!
Se lo tomaban con humor. Juno sintió que Diana se le volvía
a colgar del brazo y con unas últimas palabras de excusa dieron el incidente
por terminado.
Doblaron la esquina y fue entonces cuando Juno sintió una
repentina excitación como si estuviera cargado de electricidad. Estaban
empapados de sudor en plena calle y nadie podía verles con esa niebla lechosa y
sofocante. Ella también debía sentir lo mismo porque atrajo a Juno tirándole
del brazo hacia una pared de ladrillo. Juno le abrió las piernas y le levantó
el liviano vestido veraniego, le costaba quitarle las bragas que estaban
pegadas al cuerpo por el calor, Juno se las arrancó de un tirón y el sonido de la
tela rasgada le enloqueció. Sintió que
las piernas de ella le enlazaban por la cintura y cuando oyó un gemido de
placer supo que había acertado. La electricidad fluía de uno a otro cerrando el
circuito, pasando a una trepidante sucesión de orgásmicos jadeos y gemidos.
-Ufff –Juno suspiró mientras se subía los pantalones. Sudaba
copiosamente- … creo que habría que repetirlo más a menudo.
-Pero, oye … –dijo ella aún jadeando- ¡Tu voz no suena igual!
-La tuya tampoco. ¿No eres Diana?
-¿Diana? ¡Me llamo Sara!
Cayeron en un estado de desazón y vergüenza bíblica. Durante
un rato no se atrevieron a dirigirse la palabra hasta que Juno rompió el
silencio:
-Vamos, hay que intentar encontrarles. Diana no sabe
orientarse por este barrio.
No fue difícil encontrarles, la otra pareja estaba en un
callejón a unos pocos metros. Juno y Sara reconocieron inmediatamente los
gemidos.
jueves, 21 de junio de 2012
¡S.O.S. TÍO PEPE!
La Alcaldía de Madrid quiere quitar el rótulo luminoso de Tío Pepe con su botella antropomórfica y su eslogan Sol de Andalucía embotellado que está en la céntrica Puerta del Sol desde 1930. ¡Eso sí que no! Esa botella con su chaquetilla roja, su guitarra y sombrero cordobés me parece uno de los íconos más simpáticos del diseño español. Recuerdo aquellos anuncios televisivos en que gracias a la animación la botella hasta se ponía a bailar flamenco.
Veamos otras mascotas publicitarias que marcaron una época:
NARANJITO, BRINDIS Y TORIBALÓN
Mucho se ha hablado del polémico y rechoncho personaje símbolo de los Mundiales de 1982 pero la mayoría desconoce que Naranjito tuvo que enfrentarse a dos propuestas finalistas: el futbolista-torero Brindis y el toro Toribalón, pero el jurado quiso huir del tópico de toreo y pandereta y se decantaron por la anaranjada mascota. ¿Cuál hubieran elegido ustedes?
EL OSITO DE TOUS
El úrsido más pijo del planeta diseñado por la familia de joyeros manresanos Tous. Confieso que la primera vez que lo vi le puse el apodo de El osito del chichi por su curioso pliegue frontal. Qué le voy a hacer si yo nací en el Mediterráneo y tengo una mente retorcidilla.
ACEITUNAS LA ESPAÑOLA
Los alcoyanos además de tener un equipo de fútbol con mucha moral también son los inventores de la ingeniosa máquina que perfora, deshuesa y rellena aceitunas creada para la empresa Serpis que lanzó la primera marca de aceitunas en lata con la cancioncilla: Es La española una aceituna como ninguuuuna… De niño cuando iba con mi madre al mercado le rogaba que me comprase “Las olivas del robot” y es que su curiosa mascota recuerda un alucinante y estrambótico robot con cuerpo de lata, palillos como brazos, botellas como piernas y olivas en pies, manos y cabeza. Foto izq: en Serpis durante la noche cuando no hay nadie son frecuentes los lances entre las aceitunas y sus acérrimos enemigos los pepinillos.
RODOLFO LANGOSTINO
Posiblemente la mascota publicitaria más popular entre los niños de la década de los ochenta. Nada más verle recordamos su latiguillo: Cheeevame a cassa… Una asociación cultural hispano-argentina envió un comunicado a Pescanova pidiendo retirar el personaje por dar una imagen estereotipada de los argentinos, como aquello de los chicanos y Speedy González. La mayoría del marisco de esa empresa proviene de caladeros argentinos por lo que decidieron prudentemente congelar a Rodolfo y dar paso a su Capitán Pescanova.
EL TORO DE OSBORNE
No podía faltar. Es curioso que un símbolo tan utilizado actualmente por la extrema derecha sea obra del gaditano Manolo Prieto que durante la guerra fue el cartelista del Partido Comunista. Prieto –excelente publicitario y autor de geniales portadas de libros- dibujó la inconfundible silueta negra de las carreteras en 1956, treinta y cinco años antes de que Javier Bardem y Jordi Mollà se batieran en duelo a jamonazo limpio bajo uno de esos toros de siete metros de altura en Jamón, jamón.
Y me preguntó: ¿Qué hubiera pasado si el coronel Taylor de El Planeta de los Simios hubiera aterrizado en nuestros parajes en lugar de Nueva York?
Y por último un simpático streptease por parte de la Gallina de Avecrem. Aunque cueste creerlo este anuncio de 1967 fue prohibido por la censura con el argumento de que: "Eso lo puden ver los niños".
lunes, 18 de junio de 2012
ME PARECIÓ VER UN LINDO GATITO
Dedicado al simpático blog Las gatas madrileñas
Es una grata sorpresa que me encarguen esta portada pues me gusta Poe y me encantan los gatos. Y también dibujarlos, claro.
Los gatos y sus costumbres nocturnas... esta es una de las tiras que publico mensualmente para la revista Pelopicopata:
Esta es sin duda la receta más marciana que he publicado en este blog. Una curiosa receta escrita en verso de gato asado que encontré en una vieja librería cerca de la Puerta del Sol -por cierto que a los madrileños se les conoce como gatos- . El autor es un escritor de mediados del siglo XIX: José Fernández Bremón del que la interesante editorial Lengua de Trapo acaba de publicar Un crimen científico, relato considerado el decano de la ciencia ficción española.
GATO ASADO
.Elige un gato joven que tenga buena facha.
Cébale con riñones, asadura y pichones; prohíbe darle sustos,
desazones, castigos y disgustos, y al año tendrá el minino
el cogote muy ancho y el pelo fino.
Ya gordo y reluciente, acariciándole con la mano,
degollarás al gato dulcemente como si degollases a tu hermano.
Desuéllalo con arte, pásale un espadín de parte a parte y ásalo a fuego lento:
Báñalo con aceite aderezado, limón y ajo machacado en tanto lo volteas,
y a medio asar, es el instante, con sal lo espolvoreas.
Si al asarle seguiste mis consejos, ríete de liebres y conejos.
Y sólo algún mentecato pedirá que le des liebre por gato.
NOTA: no se ha maltratado a ningún gato al transcribir este poema-receta.
Dedicado también a mi gato Gatony. Espero que estés ahora en el cielo durmiendo sobre nubes de whiskas.
Es una grata sorpresa que me encarguen esta portada pues me gusta Poe y me encantan los gatos. Y también dibujarlos, claro.
Los gatos y sus costumbres nocturnas... esta es una de las tiras que publico mensualmente para la revista Pelopicopata:
Esta es sin duda la receta más marciana que he publicado en este blog. Una curiosa receta escrita en verso de gato asado que encontré en una vieja librería cerca de la Puerta del Sol -por cierto que a los madrileños se les conoce como gatos- . El autor es un escritor de mediados del siglo XIX: José Fernández Bremón del que la interesante editorial Lengua de Trapo acaba de publicar Un crimen científico, relato considerado el decano de la ciencia ficción española.
GATO ASADO
.Elige un gato joven que tenga buena facha.
Cébale con riñones, asadura y pichones; prohíbe darle sustos,
desazones, castigos y disgustos, y al año tendrá el minino
el cogote muy ancho y el pelo fino.
Ya gordo y reluciente, acariciándole con la mano,
degollarás al gato dulcemente como si degollases a tu hermano.
Desuéllalo con arte, pásale un espadín de parte a parte y ásalo a fuego lento:
Báñalo con aceite aderezado, limón y ajo machacado en tanto lo volteas,
y a medio asar, es el instante, con sal lo espolvoreas.
Si al asarle seguiste mis consejos, ríete de liebres y conejos.
Y sólo algún mentecato pedirá que le des liebre por gato.
NOTA: no se ha maltratado a ningún gato al transcribir este poema-receta.
Dedicado también a mi gato Gatony. Espero que estés ahora en el cielo durmiendo sobre nubes de whiskas.
jueves, 14 de junio de 2012
PALMO MÁS O MENOS (RELATO)
Dedicado a Isabel del estupendo blog PELICUARIO que me dio la idea para este relato.
Ofidio Villegas era un apasionado de las serpientes. Un amigo le facilitó la dirección de una granja donde vendían clandestinamente especies exóticas, allí tenían una Ophiophagus (literalmente: serpiente que devora serpientes) de casi tres metros de longitud. Quitaron la calefacción del terrario para que la serpiente entrara en letargo y Ofidio pudiera llevársela a casa.
Una noche Ofidio se despertó bruscamente. Dos puntos luminosos brillaban en la oscuridad de la habitación, la serpiente le observaba desde los pies de la cama. No había cerrado bien el terrario. Se acercaba, sus ojos ahora eran como chispas eléctricas que irradiaban agujas luminosas. El animal fue reptando por la cama hasta situarse completamente paralelo a Ofidio. Parecían mirarse frente a frente. Su ancha mandíbula se apoyó en la almohadilla mientras su largo cuerpo escamoso se extendía sobre la colcha dejando la cola enroscada en el suelo. Ofidio no se atrevía a moverse. Los ojos del reptil emitían ahora anillos concéntricos que se desvanecían como pompas de jabón, se acercó un poco más y sacó su lengua bífida cosquilleándole la nariz.
-Es una muestra de afecto –pensó Ofidio-.¿Porqué no? Hasta las serpientes pueden demostrar cariño como otras mascotas.
Quizás la serpiente tenía poderes hipnóticos, el caso es que Ofidio entró rápidamente en un dulce y profundo sueño barbitúrico mientras los vidriosos ojos de la bestia seguían observándole fijamente.
Al situarse frente a Ofidio la serpiente ya había comprobado que podría digerirlo sin problemas. Le sacaba un metro, palmo más o menos.
En cuanto esté profundamente dormido me enroscaré en su cuello hasta asfixiarlo y lo engulliré. Será muy fácil.
Ofidio Villegas era un apasionado de las serpientes. Un amigo le facilitó la dirección de una granja donde vendían clandestinamente especies exóticas, allí tenían una Ophiophagus (literalmente: serpiente que devora serpientes) de casi tres metros de longitud. Quitaron la calefacción del terrario para que la serpiente entrara en letargo y Ofidio pudiera llevársela a casa.
Una noche Ofidio se despertó bruscamente. Dos puntos luminosos brillaban en la oscuridad de la habitación, la serpiente le observaba desde los pies de la cama. No había cerrado bien el terrario. Se acercaba, sus ojos ahora eran como chispas eléctricas que irradiaban agujas luminosas. El animal fue reptando por la cama hasta situarse completamente paralelo a Ofidio. Parecían mirarse frente a frente. Su ancha mandíbula se apoyó en la almohadilla mientras su largo cuerpo escamoso se extendía sobre la colcha dejando la cola enroscada en el suelo. Ofidio no se atrevía a moverse. Los ojos del reptil emitían ahora anillos concéntricos que se desvanecían como pompas de jabón, se acercó un poco más y sacó su lengua bífida cosquilleándole la nariz.
-Es una muestra de afecto –pensó Ofidio-.¿Porqué no? Hasta las serpientes pueden demostrar cariño como otras mascotas.
Quizás la serpiente tenía poderes hipnóticos, el caso es que Ofidio entró rápidamente en un dulce y profundo sueño barbitúrico mientras los vidriosos ojos de la bestia seguían observándole fijamente.
Al situarse frente a Ofidio la serpiente ya había comprobado que podría digerirlo sin problemas. Le sacaba un metro, palmo más o menos.
En cuanto esté profundamente dormido me enroscaré en su cuello hasta asfixiarlo y lo engulliré. Será muy fácil.
lunes, 11 de junio de 2012
CON LA CENSURA EN LOS TALONES
Sin duda el corte más surrealista e injustificado de la historia de la censura española fue el de la película de Hitchcock Con la muerte en los talones (North by Northwest, 1959) En una escena en un concurrido restaurante Eva Marie Saint dispara con balas de fogueo a Cary Grant para que los espías rivales crean que ha muerto. Por alguna incomprensible razón la censura suprimió la secuencia con un resultado de lo más chapucero pues vemos a Grant conversando con Eva Marie y un instante después el actor está tendido en el suelo como si le hubiera dado un soponcio mientras se oyen gritos y carreras a su alrededor. Cuando vi por primera vez esa película en el cine de mi colegio y llegó la escena cortada pensamos que –como casi siempre- la copia era defectuosa y nos pusimos a silbar y patear hasta que el hermano Alonso, el cura encargado del orden, empezó a repartir capones con su maestría habitual.
Años después repusieron Con la muerte… en el programa de José Luis Garci Qué grande es el cine. En la presentación anunciaron que esta copia incluía una escena “…que aún no había sido vista en España; por eso durante ese par de minutos las voces del doblaje son distintas a las del resto de la película.”
viernes, 8 de junio de 2012
NERO WOLFE (RELATO Y RECETA)
Mi primera portada –vendrán tres más- de Nero Wolfe, el
atípico detective que resuelve sus casos sin salir de su casa con la ayuda de
su fiel ayudante Goodwin. El obeso Wolfe dedica la mayor parte de su tiempo a
cuidar sus orquídeas y beber diez litros diarios de cerveza. Al final de cada
relato convoca en su propio salón a los relacionados con el caso y lo increíble
es que vienen todos, incluso el asesino y el oficial de policía Saúl
Panzer. Cuando Wolfe desenmascara al
culpable se dirige así a Panzer:
-Lléveselo, agente, la presencia de ese sujeto ultraja estas
paredes.
Y ahora otro intrincado caso del Inspector Duralex:
EL INSPECTOR DURALEX Y EL ZAFIRO MALDITO
La vitrina de cristal estaba hecha añicos y el Zafiro
Bangalore había desaparecido. El vigilante nocturno del museo explicó a Duralex
que estaba haciendo su ronda cuando alguien se le acercó por detrás
aturdiéndole con un golpe en la cabeza con una lata de fabada La asturiana. Aparentemente el ladrón
entró por una claraboya y bajó por la pared usando zapatos de ventosa, como una
mosca humana. En el museo tenían una enorme pala matamoscas para estas
ocasiones pero se habían dejado sorprender por el ladrón.
-¿Porqué querría alguien el Zafiro Bangalore? – objetó el director del museo-. ¡Tiene una maldición!
-¿Una maldición? –se apresuró a preguntar el Inspector
Duralex.
-El primer propietario de la joya fue un virrey inglés al
que encontraron plantado boca abajo en un parterre de su jardín en Bombay. Al
cabo de unos años el zafiro reapareció en posesión de un millonario de Marbella
que se incendió espontáneamente cuando se lavaba los dientes. Parece que la
maldición aún funciona porque cuando el
museo lo adquirió el consejo de administración en pleno se puso en fila india y
danzando El baile de los gorilas de Melody se precipitó por la ventana.
-Bueno –resolvió Duralex-, quizás sea una joya con mala
suerte pero es valiosa y si quieren recuperarla vayan a la tienda de chuches de
Aureliano Buendía. Encontrarán el zafiro en su bolsillo izquierdo.
¿Cómo lo descubrió el
Inspector Duralex?
El día anterior Aureliano Buendía dijo. “ Jo… si consiguiera
un zafiro bien gordo podría dejar el negocio de los chuches.”
-Se delató a sí mismo –sentenció Duralex.
POLLO A LA CERVEZA
Esta receta le encantaría al sibarita Wolfe: dorar el pollo
en aceite después de pasarlo por harina.
Una vez frito sazonar con sal y pimienta y añadir champiñones cortados a
láminas, un pimiento rojo a dados, una cucharada sopera de mostaza a la antigua
(la de semillas) y la cerveza hasta casi cubrir el pollo. Tapar la cazuela o la
sartén y dejar cocer con el fuego al mínimo una media hora. Recomiendo
acompañarlo con patatas fritas o arroz salteado.
martes, 5 de junio de 2012
MÁS LEYENDAS URBANAS
Mi portada para el guión novelado de The Ring, la película que trajo a Occidente el boom del cine de terror japonés. Recuerdo una cena que terminó en un apasionado debate sobre quién daba más canguelo: la chica del vídeo de The Ring o el niño de La maldición.
The Ring está basado en una leyenda urbana que circulaba en Tokio a mediados de los noventa acerca de unos misteriosos vídeos asesinos. He querido darle una vuelta de tuerca a una de las más populares leyendas urbanas:
LA CHICA DE LA CURVA (RELATO)
Una chica que hacía autostop apareció de repente iluminada por el haz de luz de las largas del coche. El vehículo frenó y los neumáticos chirriaron. La joven abrió una portezuela y se sentó en el asiento trasero mientras se retiraba la espesa mata de cabellos negros de delante de sus ojos. No dijo ni una palabra, ni siquiera cuando el coche reanudó la marcha. Una lechuza ululó en la distancia extrañamente diáfana por sobre el ruido del motor. Las luces de larga distancia luchaban por iluminar el camino pero la oscuridad los rodeaba por todas partes.
La joven –diminutos ojos azules, labios fruncidos- parecía indagar la oscuridad por la ventanilla Dirigió luego la vista hacia el conductor y su acompañante, una pareja de mediana edad, tratando de observar la ruta ante ellos. Con las manos firmes sobre el volante el conductor le dirigió una sonrisa tranquilizadora a través del espejo del coche.
Pasaron curvas, montículos y bajadas hasta dar en la carretera. Una impenetrable oscuridad los rodeaba. No se oía nada hasta que la joven rompió su mutismo:
-¡Cuidado con esa curva! –indicó señalando al frente-. Es muy peligrosa.
Y entonces ocurrió.
La joven dio un alarido.
Ella estaba sola en el vehículo. El conductor y su acompañante habían desaparecido. El auto, que aún seguía en marcha, botó sobre las gruesas raíces de un enorme roble que sobresalían de tierra antes de estrellarse violentamente contra el tronco.
Ya se lo habían advertido, era una curva muy peligrosa.
LA CHICA DE LA CURVA (RELATO)
Una chica que hacía autostop apareció de repente iluminada por el haz de luz de las largas del coche. El vehículo frenó y los neumáticos chirriaron. La joven abrió una portezuela y se sentó en el asiento trasero mientras se retiraba la espesa mata de cabellos negros de delante de sus ojos. No dijo ni una palabra, ni siquiera cuando el coche reanudó la marcha. Una lechuza ululó en la distancia extrañamente diáfana por sobre el ruido del motor. Las luces de larga distancia luchaban por iluminar el camino pero la oscuridad los rodeaba por todas partes.
La joven –diminutos ojos azules, labios fruncidos- parecía indagar la oscuridad por la ventanilla Dirigió luego la vista hacia el conductor y su acompañante, una pareja de mediana edad, tratando de observar la ruta ante ellos. Con las manos firmes sobre el volante el conductor le dirigió una sonrisa tranquilizadora a través del espejo del coche.
Pasaron curvas, montículos y bajadas hasta dar en la carretera. Una impenetrable oscuridad los rodeaba. No se oía nada hasta que la joven rompió su mutismo:
-¡Cuidado con esa curva! –indicó señalando al frente-. Es muy peligrosa.
Y entonces ocurrió.
La joven dio un alarido.
Ella estaba sola en el vehículo. El conductor y su acompañante habían desaparecido. El auto, que aún seguía en marcha, botó sobre las gruesas raíces de un enorme roble que sobresalían de tierra antes de estrellarse violentamente contra el tronco.
Ya se lo habían advertido, era una curva muy peligrosa.
viernes, 1 de junio de 2012
LA FRASE DE LA SEMANA (CON RECETA)
“Los del interior tenemos más mala leche que los de la costa, es porque en el interior comemos muchos garbanzos ¡Y los garbanzos dan una mala leche…!”
(Ángel de Andrés López en Huevos de oro, 1993)
Javier Bardem se había convertido en actor fetiche de Bigas Luna desde su anterior película Jamón, jamón (1992) “Sin ti no se hace esta película” le dijo al entregarle el guión que incluía la memorable escena de Bardem cantando Por el amor de una mujer en tanga, barretina y chaqueta de leopardo. Huevos de oro es posiblemente la única película nacional sobre el ladrillazo y la burbuja inmobiliaria. Ascenso y caída de un Scarface en versión hortera y española. También aparecen en el reparto María de Medeiros y un entonces desconocido Benicio del Toro.
Es delicioso el típico potaje de garbanzos con chorizo, espinacas y huevo duro pero con este calor apetece algo ligero como el exótico hummus que es facilísimo de preparar:
Poner en la batidora los garbanzos cocidos, una cucharada sopera de tahine (crema de semillas de sésamo) dos dientes de ajo, un chorrito de limón, un buen chorro de aceite de oliva, sal, pimienta y triturar hasta conseguir una crema. Servir en un bol con aceitunas negras y pimentón en polvo, ya está listo para comer con tostadas.
Sé que no tiene nada que ver con el tema pero es que me apetecía poner un cómic:
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