martes, 30 de abril de 2013

¿ALGUIEN QUIERE UN FANGSTÜHL?

El mes pasado fui a comer a casa de Jorge Rangel, periodista free-lance y coleccionista de todo tipo de objetos, preferiblemente raros. En su comedor cuelga una bandera rumana agujereada de cuando asistió como corresponsal a la Revolución de 1989 que acabó con la dictadura de Ceaucescu. Los revolucionarios rasgaban la estrella roja del centro de las banderas. En las calles habían tenderetes donde se vendían banderas con la estrella a tres dólares y las agujereadas, por diez dólares. Con gran sentido comercial Rangel compró una bandera con estrella y la agujereó el mismo ahorrándose así siete dólares. Aún guarda la estrella sobre la que alguien había escrito en rumano: Ai dracu! (Al infierno)

Rangel me muestra una silla de apariencia antigua. Es de madera oscura y brillante tallada con un motivo neoclásico de arpas. Tiene dos curiosos brazos curvos como algunos tronos medievales que se ven en las películas. "Siéntate" -me dice. Al sentarme, de repente, los dos brazos se cierran sobre mi cuerpo dejándome apresado.
-Collons! -grito. Rangel es castellano hablante y hablo con él en ese idioma pero en ciertos momentos -como cuando te dan un susto de muerte- se recurre a la lengua materna.
Por un momento me temo que los ojos color avellana de Rangel se volverán almendrados y me dirá con la voz de Fu Manchú: "Le tengo en mi podel, imposible escapal". Mi amigo, soltando una irrefrenable carcajada,  se sitúa a mi espalda, pulsa un resorte y me libera de los brazos que se repliegan.
-Es una silla trampa que se conoce con el nombre alemán de Fangstühl - me informa Rangel-. Se pusieron de moda entre los depravados nobles vieneses de principios del siglo pasado.
-Me suena haber visto una en una película de James Bond -le digo examinando la curiosa silla- ¿Cuánto te ha costado?
No, no es mía -Rangel suspira-: no me la puedo permitir. Es de un anticuario amigo mío. La tengo en casa mientras hace reformas en su local. Dice que esa silla vale por lo menos treinta mil euros.
-Collons -...repetí.
Por cierto que esa palabreja me está saliendo cara. En mi casa tengo un bote de los tacos, a cincuenta céntimos la palabrota, desde que mi hijo Dani  regresó de colonias con un lenguaje cuartelero que tiraba de espaldas pero de momento soy yo el que lo llena de monedas. Como ayer, cuando le enseñé esta portada de la que me sentía bastante satisfecho:
-Papá -me dijo-: ese caballo parece un perro.
-Els collons! -respondí.
Otros cincuenta céntimos al bote, creo que no ha sido una buena idea. Hablando de dinero... si alguien está interesado en un Fangstühl podría intentar convencer al anticuario de que rebaje un poco el precio. ¡Quién se anima?

miércoles, 24 de abril de 2013

LIBROS, LIBROS...

A mi amigo Lluís Anton Baulenas que ayer firmó muchos libros.
ADIÓS A MIS LIBROS.
PORTADA...
El Día del Libro terminé esta portada: Catch-22, una de las mejores obras sobre el absurdo de la guerra. Yossarian, piloto de combate destinado a Italia, alega locura para ser recluido. No tardará en darse cuenta de que los locos más peligrosos no son los que están encerrados.
...Y UNA PRESENTACIÓN

El próximo lunes día 29 a las 19h. se presenta en la Llibrería Alibri (Calle Balmes, 26. Barcelona) el libro Escribiendo esperanza en el que han participado Marcos Callau del magnífico blog El tiempo detenido y un servidor, entre otros autores. Yo leeré mi microrrelato El huevo y tú que publiqué en Borgo el 14 de septiembre del 2011. Me encantaría que la gente de la blogosfera se animara a asistir y así nos conocemos. De paso anuncio que si viene alguien de lejos que tengo un cuarto libre en casa. O sea: alojamiento y comida gratis, faltaría más.



RECETA DE LIBRO: FETTUCCINE (TALLARINES) AL COÑAC
Mira por donde me está quedando otra entrada de esas poti-poti.

En La dolce vita se habla de este plato. Los noctámbulos acudían al restaurante de Alfredo a las cuatro de la madrugada para reponerse con estos Fettuccine all´ Alfredo. Estuve hace años en esta casa y, como en el libro, el dueño remueve la pasta con un con un tenedor y una cuchara de oro antes de servirla. Francamente, me pareció una pijotada.
Mientras hierve el agua salada para los tallarines fundir mantequilla en una sartén y añadir crema de leche. Con el fuego mediano remover hasta que la crema se haya reducido un poco. Añadir el coñac, cocer durante un minuto  para que el alcohol se evapore y sazonar con sal, pimienta recién molida y una cucharadita de nuez moscada.
Cuando los tallarines estén cocidos y escurridos incorporarlos a la sartén con un poco de queso rallado. Apagar el fuego y dejar la sartén tapada un minuto antes de servir para que la pasta se impregne bien del aroma.

sábado, 20 de abril de 2013

LA SALA DE LOS SUICIDAS



Poca gente sabe actualmente que en 1911 Barcelona tuvo una efímera Eurovegas: el Casino de la Arrabassada. Un complejo que incluía hotel, restaurante y hasta su propio parque de atracciones con la por entonces mayor montaña rusa de Europa. Se apostó tan fuerte por ese centro que hasta dispuso de una línea especial de tranvía que salía de la esquina de la Avenida de la República Argentina con la calle Craywinckel –mira por donde, a dos pasos de mi casa-  En el número 239 de esta última se construyó el “Salón Craywinckel”, una especie de sala de espera con teléfono, quiosco, anuncios, juegos de ajedrez, música, estanco…pero lo más siniestro es que en ese casino existía una sala en los sótanos donde los que habían perdido toda su fortuna jugando podían suicidarse de forma discreta.
Esta sala, sin ventanas, estaba completamente revestida con azulejos para limpiar fácilmente la sangre. Incluso aseguran que el personal del casino disponía de una pistola para ofrecer a los arruinados.

Y eso no es todo. Los vecinos de los alrededores hablaban de un misterioso carruaje que salía del sótano cargando un misterioso fardo. El periodista y cronista de la ciudad Marc Aloy sostenía que esos cadáveres se entregaban a los estudiantes de medicina para que hicieran sus prácticas. Es evidente que alguien del casino había leído el famoso relato de Stevenson El coleccionista de cadáveres con los entrañables Burke y Hare suministrando cuerpos frescos..
El Casino de la Arrabassada tuvo una muy corta existencia: en 1912 volvió a prohibirse el juego lo que provocó la quiebra de la sociedad y la decadencia del complejo que cerró un año más tarde.
Actualmente los restos del casino se han convertido en unas inquietantes ruinas sepultadas de maleza muy frecuentadas por equipos de parapsicólogos en busca de cacofonías, entre ellos el equipo de Iker Jiménez que el pasado octubre dedicó un programa a ese lugar.
Me ha parecido un final muy adecuado para esta entrada recordar Glommy Sunday (Lunes melancólico) conocida popularmente como la canción húngara de los suicidas; quizás la primera leyenda urbana de la historia. En 1936 las autoridades húngaras decidieron prohibirla al relacionarla con diecisiete muertes voluntarias. Se basaron en que habían encontrado referencias a la canción en las notas de los suicidas, algunos tenían además ese disco puesto en el gramófono en el lugar de los hechos. Esto proporcionó una gran publicidad a este tema que fue vendido a los Estados Unidos con el título The Hungarian Suicide Song aumentando hasta un centenar el número de muertes relacionadas con la canción que se menciona en la película española La caja Kovacs.  Hay muchas versiones pero mi preferida es la de Billie Holiday:

Por cierto que el compositor de este tema, Reszo Seres, puso fin a sus días saltando desde lo alto de un edificio en Bucarest. Sin duda el suceso aumentó la leyenda negra de Glommy Sunday.

martes, 16 de abril de 2013

BORGO CUMPLE CUATRO AÑOS



Quién me lo iba a decir. Todo empezó hace cuatro años en una etapa difícil de mi vida en la que me entretenía dando la brasa a mis compañeros de piso con mis historias y frikadas varias. Un día me dije. ¿Y si les doy la matraca a otros? podría publicar mis dibujos y alguna que otra receta para condimentar el plato o lo que salga.
Muchas gracias, de corazón, por haber dado vida al blog con vuestros comentarios, opiniones, simplemente pasando por aquí... y muy especialmente por tantas experiencias que me habéis dejado compartir. Gracias a todos y todas.
Y para animar el evento nos visita el famoso grupo Los Hippy-Lollas después de una triunfal gira de tres meses por Andorra con su hit Love, love love. Pues eso: Love por un tubo.

viernes, 12 de abril de 2013

¿DÓNDE VAN LOS ARMADILLOS CUANDO MUEREN?

Dedicado a Clementine del blog La gran pantalla a la que le gustan mis entradas Poti-poti.
Poti-poti es una expresión catalana que significa batiburrillo. Así es como llamo a las entradas a las que pongo un poco de todo, como esta:
DOS PORTADAS DE TERROR
Me encanta hacer portadas de terror y me han coincidido dos esta semana. Palomos del infierno de Robert E. Howard,el creador de Conan el bárbaro, una historia de zombis en los pantanos de Louisiana y el clásico La pata de mono, un amuleto que concede tres deseos pero a un precio muy alto.
Y no podía faltar una receta. En mi entrada Sexo de ultratumba del 27 de marzo hablaba de este plato:
POLLO AL JEREZ CON ACEITUNAS

Sofreír en una cazuela los trozos de pollo con dos dientes de ajo, reservar en un plato y salpimentar. En el mismo aceite poner aceitunas tipo Gordal sin hueso cortadas a rodajas. Darles unas vueltas y añadir el pollo, una hoja de laurel (Importante: sin el toque del laurel ya no sabe igual) cubrir lo justo con el jerez y tapar la cazuela. Dejar cocer con el fuego al mínimo durante media hora.

domingo, 7 de abril de 2013

OSCARS, INCIDENTES Y PIFIAS


Robert Opel, desnudo, eclipsando el smoking de David Niven durante la retransmisión de los Oscars de 1974.


En la última edición de los Premios Goya sin duda lo más comentado fue cuando los presentadores dijeron desde su atril a los autores de la música de Los niños salvajes que se habían confundido, que el premio era en realidad para Blancanieves. Sin embargo los Oscars de Hollywood también cuentan con historias y anécdotas fuera del guión previsto:
45 SEGUNDOS Y A LA CALLE
En 1942 Greer Garson recogió su Oscar por La señora Miniver y se pasó la friolera de siete minutos y medio agradeciendo su premio. Desde entonces la Academia acordó conceder solo 45 segundos a los ganadores del trofeo, pasado ese tiempo la orquesta empieza a tocar interrumpiendo el discurso.
BRANDO RECHAZA EL OSCAR

Probablemente el incidente más recordado de los ocurridos en el Kodak Theatre. En 1971 George C. Scott se convirtió en el primer actor que rechazó un Oscar alegando que no le gustaba el personaje del general Patton. Dos años después le imitó Marlon Brando cuando fue premiado por su interpretación de Vito Corleone en El padrino. Brando envió en su lugar a una mujer india vestida con ropa tradicional. Littlefeather –así se llamaba- subió al podio y rechazó con un gesto el Oscar que le ofrecían Roger Moore y Liv Ullman, acto seguido se dirigió hacia el atril: “Me llamo Sacheen Littlefeather. Soy apache y presidente de la Organización Pro Derechos Indígenas. Brando me ha pedido que les diga que no puede aceptar ese premio por la forma en que el cine muestra a los nativos norteamericanos”.
Como si formara parte de un guión, cuando Littlefeather abandonó el escenario John Wayne ocupó su lugar. Alto, beligerante, se acercó al micro y cantó un viejo tema: You should dedicate to do movies (Dedícate a hacer cine) Estaba claro que el título de la canción era un mensaje para Brando.
Poco después se descubrió que Little feather era en realidad una actriz llamada Marie Cruz y que sólo era medio indígena por parte de padre.
EL EXTRAÑO OSCAR PARA MARISA TOMEI

Los Oscars también tienen su leyenda urbana: ¿Marisa Tomei era realmente la ganadora del Oscar a la mejor actriz secundaria de 1993?
Ese año estaba cantadísimo que ese premio se lo darían a Vanessa Redgrave por Retorno a Howards Hend aunque también se apostaba fuerte por Judy Davis (Maridos y mujeres) El actor encargado de anunciar el premio era Jack Palance que desde el principio tuvo un comportamiento chocante, nada más subir al escenario se puso a hacer flexiones para demostrar que a sus setenta años estaba en plena forma. Entre la platea se extendió el rumor de que iba algo achispado –el actor reconoció años atrás haber sido alcohólico- y entonces Palance los dejó a todos boquiabiertos al pronunciar el nombre de Marisa Tomei por El primo Vinny, una discreta comedia con Joe Pesci.
¿Jack Palance estaba trompa? ¿Se equivocó al leer el nombre o Tomei era realmente la ganadora? Hay especulaciones para todos los gustos.
NADA DE BUTACAS VACÍAS
Trabajé unas semanas en una taberna de antojitos (tapas) en Ixtapa, México, un día contaré algunos anécdotas ¿Pero eso qué tiene que ver con los Oscars? se preguntarán. Al grano: allí preparaba cócteles un tal Fabricio Soto, un atractivo muchacho que se fue a Hollywood a probar fortuna como actor pero sólo consiguió trabajar de modelo ocasional. Un día su agencia se lo llevó a la entrega de los Oscars de 1995 con un curioso encargo:
“Resulta que la academia no quiere que se vean en televisión asientos vacios cuando alguno de los invitados abandona momentáneamente su localidad” –me explicó Fabricio-. “Por eso en el salón hay varios hombres y mujeres vestidos de etiqueta contratados para ocupar esa butaca hasta que regrese el invitado. Teníamos la norma de no hablar con la persona sentada a nuestro lado a menos que se dirija a nosotros.”
“Me senté en una butaca que había quedado vacía, a mi lado estaba Cher. No fue nada agradable, poco antes había comido muy deprisa y el fortísimo perfume de Cher me daba nauseas. Por suerte su acompañante regresó pronto, un minuto más tarde y vomito encima del vestido de Cher.”
…Y UN DIVERTIDO OSCAR

La academia demuestra a veces su sentido del humor. En 1939 Walt Disney (aquí le vemos con Shirley Temple) recibió este curioso premio por Blancanieves y los 7 enanitos: un Oscar de tamaño natural acompañado de siete pequeñas estatuillas.
  

miércoles, 3 de abril de 2013

SEMANA SANTA EN PARÍS

Dedicado a mis amigos Claudia y Ale, con ellos el Burdeos, el Camembert y París saben mejor.
Llegué a París justo a tiempo para una ola de frío siberiano. Nada que no se arregle con calvados y una buena sopa de cebolla. Hacía mucho tiempo que no venía. Para que se hagan una idea, la última vez cambié pesetas por francos.
MIS PORTADAS PARISINAS
El guión novelado de una magnífica película: La travesía de París. Dos estraperlistas -Bourvil y Jean Gabin- llevan unas maletas cargadas de carne de cerdo por el París ocupado:
DÍAS TRANQUILOS EN CLICHY: las andanzas del pichabrava de Miller. Desde Clichy no se ve la Torre Eiffel, fue una imposición de la editorial.

EL HOMBRE INVISIBLE EN PARÍS: aquí no se ve ni París ni la Torre Eiffel. De hecho, lo lógico es que tampoco se viera al hombre invisible.

Y termino con un apropiado microrelato que me encanta: Como en las películas francesas del mexicano  Armando Dévora:

Después de hacerle el amor encendió un cigarrillo y lo fumó pensativo: como en las películas francesas...
Luego se levantó de la cama y empezó a vestirse lentamente: como en las películas francesas...
La miró, apagó el cigarrillo presionando fuertemente sobre el cenicero y se fue sin despedirse: como en las películas francesas...
Al llegar a su casa encontró a su mujer acostada con otro: como en las películas francesas.