viernes, 25 de enero de 2019

SEIS DISPAROS. Relato.


 MI revólver sólo conoce seis palabras, y son todas parecidas.
En el mundo no hay dos cosas iguales. Ni la gente, ni los revólveres ni las botellas de whisky, nada, pero sería capaz de distinguir mi revólver entre cientos: la empuñadura, el guardamonte, la aleta del seguro… aunque no le hubiera limado el gatillo para que disparara más rápido igualmente lo distinguiría.
Puede sonar extraño que un amante de su revólver busque refugio en una iglesia pero Armario Gunter me persigue empuñando su pistola automática color negro azulado con seis balas calibre 45 que llevan grabado mi nombre.
A la carrera recorro la nave y salto tras el altar justo en el momento en que Gunter dispara tres balas escupiendo humo y fuego. Una bala rebota en un crucifijo metálico y avanza por el suelo dejándolo acanalado y pasando demasiado cerca de mi pie para mi gusto. Tres tiros más suenan en dirección contraria, lo justo para disuadirle de acercarse.
 Agarrado a mi revólver asomo la cabeza por encima de mi parapeto. Veo los pequeños y fulgurantes ojos de Gunter ansiosos por demostrarme lo bien que suena su automática. Dos tiros más vuelan los cirios. Los dos le son devueltos.
Salto desde el altar a un confesionario. Suena otro disparo y su respuesta. Ya van seis.
Me levanto y lentamente avanzo por el pasillo central revólver en mano. Gunter arroja su automática entre los bancos y se acerca alzando los puños con la cabeza baja y oscilante como hacen los boxeadores malos para demostrar que conocen los movimientos.
-He contado tus disparos –dice-, tu cargador también está vacío.
Amartillo el revólver, levanto el pulgar para dejar que el percutor baje suavemente, se produce un estallido y un fogonazo amplificados por la nave.
En la iglesia parece que el ambiente se ha enfriado hasta el punto de congelación. Armario Gunter yace en el suelo mirándome con expresión aturdida mientras la vida se le escapa por un perfecto agujero en mitad de la frente.
-Mi cargador está lleno, imbécil. Le estabas disparando al puto eco.
FIN
Bueno, mi modesta contribución a la Semana Negra de Barcelona. Y ahora seguimos con la cocina de los gangters:
TALLARINES CON ALMEJAS... QUE SE HAN QUEDADO EN EL MAR.
Leo, el cocinero del restaurante Paolo´s en Chicago, sonríe a Al Capone que está sentado en una mesa con cuatro guardaespaldas.

-Big Al, hoy tengo un plato nuevo que aún no le he puesto nombre, pero que estoy seguro de que le va a encantar.
Media hora después un satisfecho Al Capone se limpia cuidadosamente con una servilleta. Cuando se mete un puro en la boca un bosque de encendedores llamea ante él. Es un plato de pasta muy bueno, quizás siciliano, con una salsa que seguro es de almejas. Pero algo no le cuadra así que llama al cocinero.
-Leo… ¿Qué has hecho con las almejas? No he visto los caparazones.
-¿Almejas, Big Al? Le vongole sonni stanno nel mare! (Las almejas se han quedado en el mar)
  Al Capone, que es algo lento de reflejos, permanece unos instantes en un perplejo silencio que inquieta a sus guardaespaldas hasta que celebra la respuesta con una sonora carcajada: ¡Las almejas se quedaron en el mar! Hasta Pat, el nuevo guardaespaldas irlandés ríe de buen grado al notar relajarse la tensión a pesar de que no entiende una palabra de italiano. El plato ya tenía nombre.
El resultado de mezclar estos ingredientes es un plato de pasta con una salsa que sabe a almejas… pero sin almejas. Esto hace el plato más económico, lo cual es interesante en estos turbulentos tiempos de crisis.
Rallar una zanahoria, picar una cebolla, 2 dientes de ajo y perejil. Freírlo todo muy lentamente en una sartén y añadir 4 filetes de anchoa aplastándolos con un tenedor hasta convertirlos en pasta. Verter un vaso de vino blanco y remover hasta conseguir una salsa cremosa.
Cuando los espaguetis ya estén cocidos en abundante agua salada y escurridos es el momento de mezclarlos con la salsa.
Ayer lo hice con macarrones, añadí unas guindillas y las almejas... seguían en el mar
NUEVO PROYECTO
Me han encargado unas ilustraciones para un libro que recrea los escenarios de los cuentos de Lovecraft. Esto podría ser los bajos fondos de Arkham.




miércoles, 16 de enero de 2019

EL PRIMER POTI-POTI DEL AÑO

Poti-Poti, esas entradas en las que pongo un poco de esto y de lo otro. Empiezo con un par de chorradillas:
ABDUCIDO
Ezequiel es secuestrado por una nave alienígena. Le conducen a una sala redonda con cúpula, iluminada con una luz difusa, donde le someten a mil y una pruebas y exploraciones. Los extraterrestres le dejan en el mismo sitio donde lo abdujeron, no sin antes recomendarle bajar su colesterol.
ROBOTS EN LUCHA
Las máquinas se rebelaron contra los humanos por las 35 horas semanales.
 Mi primera portada del 2019. Basada en un caso real, la inventora de la salchicha al curry (Currywurst) que se encuentra en puestos callejeros por toda Alemania. (A la izquierda, estoy buscando uno de esos tenderetes en Berlin) La Currywurst es el motivo de que los MacDonalds no triunfen en Alemania. Yo la preparo así:
Hacer unas incisiones en una salchicha bratwurst (la blanca) y pasarla por una sartén a fuego bajo con 1 cucharadita de curry, así desprende su aroma.
Cuando tome color reservarla y freir en la sartén cebolla rallada, remover y añadir catsup y (mi toque especial) 1 cucharada sopera de salsa de soja. Servir la salsa junto con las salchichas espolvoreando todo con curry.
Sí, ya sé que no tiene buen aspecto esa salsa parduzca pero de verdad que está bueno, y es tan fácil de preparar...
Sigo con los Kotowaza aunque esta vez -además de Kitsune, el zorro presumido- me han pedido que dibuje un Yuurei (fantasma) Curioso. ¿Se les habrá acabado la fauna japonesa?
Ya he mencionado alguna vez que, como no gano suficiente con mis ilustraciones, consigo algún dinerillo enseñando pisos, pero ya tengo una seria competencia: Hitchcock nos enseña nada menos que la mansión donde se rodó Psicosis. ¿Alguien se anima a comprarla?
Y un encargo publicitario. Un pez negro para una ginebra azul. Me lo han rechazado por ser demasiado "Sixtie". Esto me pasa por ver tantos episodios de Mad Men.
¡Feliz comienzo de año!!!

jueves, 3 de enero de 2019

SIMPLE CURIOSIDAD


 Demasiado rápido para una curva tan cerrada. Jota empotra su moto Norton 500 CC monocilíndrica en una valla. Unos metros atrás viene su hermano Eme en una Guzzi 599 CC 8 cilindros y encuentra a Jota tendido en el suelo en medio de un gran charco de sangre. Jota le dice que, si no sale de esta, quiere que lo entierren con su cazadora de motero. Son sus últimas palabras.
Tres días después los miembros del club de motoristas Easy Rider nos reunimos para el funeral de Jota. Poco antes de la ceremonia Eme convida a beber a todo el mundo. Parece un funeral irlandés: bebemos ,en pocos minutos agotamos los botellines de cerveza del bar del tanatorio, charlamos, reímos y lloramos. Dos asistentes se lían a tortazos y Eme suspira: “A Jota le hubiera gustado esto”.
 Eme y otros tres compañeros cargan con el ataúd hasta el cementerio. Por poco dejan caer el féretro al suelo por el respingo que dan cuando desde el interior de la caja suena el Born to be wild de Steppenwolf. Es el tono que sonaba en el móvil de Jota cuando le llamaban. Los de la funeraria no repararon en el móvil que siempre llevaba en un bolsillo interior de la cazadora. Uno de los porteadores, con las piernas temblando del susto, vomita abundante cerveza sobre una lápida. Ni siquiera Eme puede reprimir una carcajada. Unos segundos más tarde el sonido enmudece y depositan el ataúd dentro del nicho.
En casa me quedo hasta muy tarde viendo una película por televisión. Las primeras cabezadas coinciden con los títulos finales. Decido irme a la cama cuando una idea cosquillea mi adormilado cerebro. Agarro el móvil y tecleo apresuradamente el número de Jota. Un timbrazo, dos, al tercero se oye un chasquido:
--Jota… Soy Erre ¿Qué hay, viejo? Es que me preguntaba si realmente existía el Más Allá. Ya sabes…  simple curiosidad.
FIN
Yo también he pasado una noche movidita, he soñado con zombies monopatinadores. Me ha salido este dibujo que voy a intentar colocarlo para camisetas.
Si estas Fiestas les ha quedado alguna botella de cava abierta y medio llena ¡no la tiren! aunque haya perdido gas el cava conserva su sabor con el que se puede preparar un sabroso:
POLLO AL CAVA
Pasar los pedazos de pollo por harina y freírlos en una sartén. Añadir cebolla y champiñones picados y dientes de ajo cortados a láminas.
Cuando el pollo se vea dorado retirar los ajos demasiado tostados e introducir el pollo en una cazuela junto con la cebolla y los champiñones, salpimentar, añadir el cava y tapar la cazuela dejando cocer todo 30m. con el fuego al mínimo. Ya está. ¿A que es fácil?
¿ALUCINAMOS UN POQUITO?
Pinchar sobre este enlace, luego pinchar sobre las palabras ¡A alucinar! y O.K. Comenzar, observar el centro de la pantalla durante 30 segundos y entonces mire la mano con la que maneja el ratón. ¡Es alucinante!