sábado, 10 de octubre de 2009

DOS PELÍCULAS MUY MALDITAS


El último hombre de la tierra.

El pasado año, aprovechando el estreno de la –horrible- película de Will Smith, me encargaron esta portada de la magnífica novela de Richard Matheson Soy leyenda. La versión más recordada es la deCharlton Heston: El último hombre vivo (1971) pero existe una anterior: The Last Man on Heart (1961) protagonizada por Vincent Price. Diversos problemas (disputas entre Matheson –también autor del guión- y los productores, pésima distribución…) consiguieron que este filme fuera prácticamente invisible. Está bajada por completo en youtube, solo en inglés, (nunca se estrenó en España) pero un amigo mío está trabajando en el subtitulado y prometo colgarla en este blog cuando esté disponible. Mi parte preferida es esta: cuando Price es sorprendido por los no muertos. Es inevitable pensar en cierta famosísima cinta de terror y es que George Romero reconoció que estas escenas le influyeron mucho al filmar su Noche de los muertos vivientes (1968) Por primera vez se ven en el cine unos vampiros vestidos de calle, sin capa ni chistera, pero mucho más efectivos que los digitalizados vampiros de la versión de Will Smith.

El día que el payaso lloró

“Antes me gustaba Jerry Lewis pero ahora veo lo burdas que son sus películas. Su humor solo puede gustar a los niños…” (Harvey S. Pekar, guionista de cómics)
La década de los 70 no empezaba bien para Lewis. La crítica había masacrado su último filme ¿Dónde está el frente? (1970) y su show en TV estaba a punto de ser retirado por baja audiencia. Era el momento de un cambio de registro: en 1971 cayó en sus manos un guión de Joan O´Brien titulado The Day the Clown Cried y le entusiasmó. El protagonista es un payaso en la Alemania nazi que por contar chistes sobre Hitler va a parar a un campo de concentración. El jefe del campo encarga al payaso la misión de distraer a los niños mientras son enviados a la cámara de gas.
Sería el primer papel serio de Lewis que adelgazó 17 kilos y puso todo su dinero para la recreación del campo de Auschwitz en Suecia. Los otros papeles principales fueron para Anton Diffring , el comandante del campo y Harriet Anderson- la protagonista de Un verano con Mónica de Ingmar Bergman- en el papel de una deportada. Cuando la película estaba casi terminada se suspendió el rodaje por razones poco claras. Jerry Lewis conserva la única copia existente que guarda celosamente en una caja fuerte. El actor decidió que nunca nadie vería esa película y se niega a hablar sobre el tema desde entonces. Spielberg está interesado en rodar una versión con Robin Williams de protagonista y ha ofrecido, a cambio de visionar el filme, una gran suma a Jerry que aún no ha respondido. Estas escenas del rodaje es lo único que se puede ver por ahora de una de las películas más malditas y misteriosas de la historia.

5 comentarios:

miquel zueras dijo...

Pues sí que me la ha jugado este video de la "Película más maldita de la historia". Una semana antes se podía ver sin problema. Bueno, tampoco se veía gran cosa. Solo eso: unas escenas del rodaje. Disculpas. Borgo.

joanbcn dijo...

Con "El día que el payaso lloró", inevitablemente me viene a la cabeza "La vida es bella", quizás más que nada por la forma de abordar el drama que supusieron los campos de concentración. Esa combinación de drama y humor que da mayor contraste y recalca aún más lo trágico. No me habría imaginado nunca a Jerry Lewis haciendo un papel así, pero como siempre se ha dicho los actores cómicos son los mejores para encarnar papeles dramáticos.

miquel zueras dijo...

La verdad es que Jerry tendría que esperar a 1983 cuando interpretó "El rey de la comedia" de Scorsese, en su primer papel no cómico. Es otra película "maldita" (el mayor fracaso de Scorsese) aunque a mí me parece muy buena y es quizás su mejor papel. Borgo.

Salvador Sáinz dijo...

No se abre el video de Jerry Lewis.

miquel zueras dijo...

No se pierde gran cosa, Salvador: unos 30 segundos de Lewis sentado en su silla de tijera en un plató. Desgraciadamente, no hay más. Borgo.