miércoles, 6 de junio de 2018

CARNÍVOROS


Primavera 2076. Quintero, León y Quiroga se dirigen en el coche del primero al Chuletón Vanguardista. Tienen reserva gracias a que León conoce al maître, pues ese asador es uno de los locales más extraordinarios de la historia de la hostelería.
-Usan animales diseñados genéticamente –les informa Quintero-.¡Algunos incluso sirven en las mesas!
 Cuando llegan el restaurante ya está lleno de gente, conversaciones y olores a especias exóticas. Las mesas están distribuidas en un amplio círculo alrededor de una gran estatua de una vaca a tamaño natural. Se les acerca un camarero.
-¿Quieren ver la carta? ¿O desean el plato del día de carne?
-¡Excelente! – dice León-, queremos carne.
Los tres comensales se quedan mudos de asombro al ver que un cordero se acerca a su mesa con apacible sonrisa rumiante.
-Bienvenidos –saluda con voz aguda-. Soy el cordero Gabriel y vengo a endulzar su mantel.
“Ningún cordero en su sano juicio diría eso”, piensa Quiroga.
-Permitan sugerirles mi costillar –gorjea el cordero-, tierno y jugoso. También recomiendo mi paleta, asada al punto con ajo y romero. O los riñones al jerez con guarnición de…
-¡Pero esto es horrible! –exclama Quintero-. Este animal pide que nos lo comamos.
-Al menos parece que la idea no le desagrada –dice León.
 Los tres se quedan fijamente mirando al cuadrúpedo que espera sus respuestas con ojos acuosos mientras empieza a rumiar y se traga el bolo alimenticio. En la mesa se está creando mucha tensión. “No puedo”, piensa León y dice:
-Tomaré una ensalada con espárragos.
-Yo los crudités –dice Quintero.
-Para mí, ravioles de espinacas –pide Quiroga.
El cordero les dedica una reverencia  y se aleja contoneándose hacia la cocina. El maître ha distinguido a León y se acerca a los tres amigos con gesto ceremonioso. Al ver sus expresiones confusas decide aclararles la situación.
-¡Bienvenidos al Chuletón Vanguardista, el asador del futuro! – el maître baja el tono de voz y continúa-: León, señores… este local forma parte de una cadena vegana camuflada. Los clientes se sienten incómodos al ver un inocente animalito pidiendo que lo devoren y cambian sus hábitos alimenticios.  
 -Lo entiendo –dice León-. Después de esta experiencia creo que me volveré vegetariano.
-Y yo, vegano –añade Quintero.
-Y yo me paso al crudivorismo –tercia Quiroga.
Un conejo salta entre las mesas y al entrar en la cocina ordena: “¡Una de coliflor con sésamo para la mesa ocho!”
-¿Y causa el mismo efecto con todos los clientes? –pregunta León.
-Con todos, no –suspira el maître mirando a la mesa de enfrente donde una vaca, con graciosos movimientos de grupa, ejecuta unos pasos de tango ante una pareja.
-¡Qué relinda la vaquita, che!!! –aplaude entusiasmado el hombre y pide-: Vacío, con papas fritas a caballo.
-Para mí, milanesa –dice la mujer-, y chinchulines.
-Con los argentinos no hay manera –murmura el maître.
FIN
¡ESTOY DE MUDANZA!
 Intentaré que la periocidad de Borgo no se vea alterada, aunque mi piso va cobrando un aire de campamento a punto de ser levantado con sus cajas y embalajes. Una cosa tengo clara en cuanto me traslade: quiero volver a pintar. Lo decidí al ver este cuadro de hace 25 años que me sugirió un sueño que tuve con un local mitad coctelería mitad matadero, de ahí la res colgando.
 He ido a una tienda de  de artículos de dibujo para comprar un tubo de un color que siempre me ha gustado, Amarillo Índico. La dependienta me ha informado: "Este color se hace con pipí de vacas de la India alimentadas con mangos". Me he puesto a pensar en las muchas veces que he dado forma a las cerdas del pincel con la lengua...
La de cosas curiosas que uno encuentra vaciando cajones. Me encontré con esta foto que le hice a un kabileño en su puesto de fruta en la frontera con Marruecos dutante mi servicio militar. Me dijo: "En mi pueblo creemos que las fotos roban el alma, jay (amigo) Tienes que darme 100 pesetas." 
No era un precio muy elevado pero me pregunté si era a cambio de toda su alma o solo 100 gramos. Ahora me da por soñar que suena el timbre de madrugada, es el kabileño que viene a recuperar su alma. Le digo: "100 euros. La tarifa ha subido, jay."


46 comentarios:

El Doctor dijo...

Magnífico relato y una buena manera de hacerse vegetariano. Yo que tiro siempre de embutidos; lo digo por la pereza de ponerme a cocinar, ya sabes, unas lonchas de lomo a la plancha que es lo más fácil de cocinar o, pinchos morunos ya ensartados en su palo y con las especias; pechuga de pollo troceada y lista para la sartén. Fuet (Casa Tarradellas), choricillo picante. Morcilla de Málaga. Beicon (sabroso y crujiente), que impregna tu casa a primera hora de la mañana…

Tu relato lo sitúas en un futuro y nos pones a esos tres tipos que compusieron la banda sonora de la España gris de posguerra. Hay canciones que me gustan porque las escuchaba en la casa de mi abuela en uno de esos tocadiscos que se recogían dentro de su propio altavoz, y ella las tatareaba al mismo tiempo que le daba una paliza a un pulpo contra el frío mármol de la cocina. ¿Es acojonante imaginar que en el 2076 podrás comprar un pulpo y el octópodo, una vez en la cocina, te mirará con sus ojos saltones y te incitará con voz melosa a que le des una buena tunda de palos para ablandarse?

Tu restaurante “Chuletón Vanguardista”, con sus bonitos animales pululando por entre las mesas, a son de arpa, y las liebres correteando e incitando a que sean devoradas es muy anti-disney. Aquí vemos una portada buenísima de Gargantúa y Pantagruel, uno de mis libros favoritos de toda mi vida. “Madame Grandgousier, que estaba preñada, se dio tal hartazgo de callos que hubo que administrarle un astringente; éste fue tan fuerte que los lóbulos de la placenta se aflojaron, el feto de Gargantúa se deslizó dentro de una vena, subió por ella y salió por la oreja de su madre”. Así vino al mundo el puto Gargantúa. Ay, ¿qué sería la literatura y el cine sin estas bacanales cárnicas? Recuerdo el capítulo de el “Satiricón”, de Petronio y película de Fellini donde se describe el banquete de Trimalción. Es un verdadero asco de comilona, mi querido Miquel. ¿Y qué me dices de la escena de la película de Fellini “Roma”, cuando todos están comiendo en una terraza espaguetis con albóndigas? Incluso una mujer dice, con la boca llena, que cuando caga deja ir un zurullo … ¿Y qué me dices de la película “La gran comilona”? ¿Holocausto caníbal? Y todas esas películas que hemos visto de niños sobre aventureros en África y son invitados a cenar por esas tribus que ponen en el espetón al abuelo recién muerto… Y esa comilona grotesca de “Indiana Jones y el templo maldito” …

Me gusta mucho tu portada de Move’s house. El rinoceronte es un animal muy inquietante empleado tanto por los surrealistas como Ionesco en su teatro y Fellini en “Y la nave va”. Y creo que sí, que deberías pintar, aunque sea con pintura de pipí de vaca. Suerte de ellas que no tienen problemas de próstata. Algún día tendrás que enseñarme tus pinturas, amigo mío. Y es cierto sobre esa manía de algunos pueblos en creer que la fotografía es la pérdida del alma. ¿Qué opinarían esos pedestres y asilvestrados sobre la locura de nuestros supuestos refinamientos expuestos en Facebook o Instagram? Tú le pides cien euracos al tipo de la chilaba y el fez pero, ¿qué podría pensar él de Mark Zuckerberg?

¡Abrazos!

Anónimo dijo...

Hola Miquel
Yo creo que los antepasados de estos QuinteroLeónyQuiroga le dirían al tierno lechal: "Déjate de coplas y, por un día, nos pasamos al tango".
Un saludo, Manu3l.

Doctora dijo...

Cuando Lisa Simpson se hace vegetariana Bart responde que en un documental decían que a las vacas les gusta que las maten ;P

Yo pienso que las 100 pesetas fueron simplemente por la foto. Si la foto incluía además el alma, o parte del alma sería otro precio, llevaría suplemento.

Dicen que las mudanzas son uno de los motivos más frecuentes de depresión, así que mucho ánimo.

Besos!

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Yo recordé esa capitulo que menciona Doctora y tambien uno en que van a un lugar en que se elige a la vaca para matar, que luego será asada.
¿Asi que se trata de una convertir al vegetarianismo o veganismo?
Creo que no funcionaria tampoco con Los Simpsons, exceptuando a Lisa. ¿Homero no tiene algo de argentino?

Estaria bien tu regreso a la pintura.

Saludos.

ethan dijo...

Creo que ya te lo dije alguna vez, me gusta los nombres que les pones a tus personajes, siempre cuentan una historia paralela, o eso me parece a mí. Muy bueno el relato de hoy con esa distopía vegetariana que no puede con los argentinos (me encanta la carne de esa gente, no la humana, sino la que cocinan en sus restaurantes).
Saludos.

Clementine dijo...

Ja,ja,ja... me encanta el relato, me chifla, tienes una creatividad maravillosa. Y también me gusta lo que cuentas sobre tu mudanza. Y tus dibujillos. ¡Muchos besos, Borgo!

Nury ruri dijo...

Muy bueno ese guiño a Magritte con el jamón.
Yo también prefiero no ver al bicho vivo antes de comerlo, sería fácil convencerme para una ensaladita.
Suerte con la mudanza. Hay que tomárselo con humor. La última yo la tuve fácil. Recuerdo que bajamos todo por las escaleras de un quinto a un segundo (la más cómoda que he hecho en la vida).
Y qué bien que cojas de nuevo las pinturas.
Saludos.

David dijo...

Pues mira.. Desde hace un mes o así, me he vuelto vegetariano. No llego al veganismo como mi hija (quitarme ya de la leche, huevos y derivados era demasiado)... y precisamente por algo en ese plan. No voy a hacer proselitismo, pero me ha hecho gracia tu relato. En mi caso (y el de mi mujer) los "corderos" que nos convencieron fueron nuestros hijos cuando fuimos a verles a Edimburgo el mes pasado.
Lo de la mudanza lo acabo de pasar también hace no mucho. Ánimo!
Me encanta la portada del rinoceronte.
Un saludito.

ricard dijo...

Me ha gustado el relato, sobre todo el detalle de los argentinos. Están obsesionados con la carne, el dulce de leche, los helados y la pasta demasiado hecha. Y el mate, claro...

Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Melmoth! Irresistible combinación de comida rapida... yo no puedo resistirme a unos buenos pinchos de cordero comprados en una carniceria halal acompañados de una ensaladilla rusa. ¡Y el fuet! Fernando Esteso solía pedir un fuet y un cuchillo en los restaurantes y se lo ventilaba él solo.
También conozco sus canciones por mi abuela que las cantaba por casa, una costumbre que yo he seguido (canto al cocinar y fregar platos de todo un poco) Imagino un pulpo masoquista suplicando: "¡Pégame, master!".
"Roma" es un canto al hedonismo con esa gente comiendo en la calle... y "La gran comilona" con esos platos cocinados realmente por Ugo Tognazzi que era un gran chef.
Esa portada es para una novela sobre una pareja de mudanza que se encuentra con una escultura de rinoceronte tamaño natural y él se obsesiona con la idea de que el bicho cobra vida por las noches. Mira por donde tengo un alma comprada de kabileño, la meteré en una caja y me la llevaré al nuevo piso.
Abrazos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Manu! Estuve en un asador libre argentino de esos que puedes comer lo que quieras por un precio fijo y el churrasco era delicioso, pero creo que no habría podido con una vaca que me bailara "La cumparsita" de Gardel. Sensible que es uno.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Doctora! Es como un anuncio que veía de niño en la tele con una gallina desfilando encantada hacia el horno.
27 gramos es el peso del alma en una película. Pues eso: 100 pesetas 27 gramos.
Gracias. La mudanza es agotadora pero de momento la llevo bien. ¿Qué hago luego con tantas cajas?
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Demiurgo! Trabajé de ayudante de cocina en un sitio parecido pero con langostas, la gente elegía la que quería para "el sacrificio". Pescaban la langosta con una red y en la cocina la dejaban caer en un cubo con agua salada mientras sacaban una langosta del congelador.
En Buenos Aires me hacía gracia que Homer (en España) se llamase Homero y que las voces del doblaje se parecían mucho a las de acá.
Iré publicando los cuadros a ver qué tal, espero sus críticas honestas.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Ethan? Siempre tengo problemas para elegir los nombres, por eso recurro a colores (Cobalto, Magenta...) y al ser tres me he decidido por estos tan copleros.
Los argentinos dan mucha importancia al corte de la carne. Me encantan la entraña y el vacío de los asadores de Buenos Aires aunque echaba de menos un entrecot sangrante pues allí sirven la carne muy hecha.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Clementine! Gracias y muchos besos y deséame suerte con la mudanza que tengo la casa como el campamento de Livingstone pero sin porteadores... ya me vendrían bien.
Buen finde!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Nury! La idea del relato me vino cuando una pareja que vino a comer a casa me dijeron: "Si tuviéramos que cazar o descuartizar la carne seríamos vegetarianos". ¡Es tan fácil comprarlo todo cortado y pelado en el super!
Me está encantando mancharme las manos de pintura, qué diferencia con el aséptico ordenador...
Saludos!
Borgo.

Clementine dijo...

¡Mucha suerte! Ahora te envío porteadores con Stanley.¡Buen finde y besos!

Folk dijo...

Surrealista relato, y mas surrealista debería ser la copla resultante de la imaginación de esos tres compositores inspirandose en esas circustancias...

Yo tambien ando en el proceso de meter las cosas en cajas para mudarme, sin prisa pero sin pausa, así que puedo mas o menos comprender lo que sientes en estos momentos respecto al mundo mudanza, ja..ja.. tengo un conocido en el mundillo del comic, que se ha mudado tantas veces que en la ultima solo llevaba una "cintiq" y poco mas...

Parafraseandome a mi mismo en una frase que puse en tu anterior entrada:
si te pones de nuevo con los pinceles seguro que la humanidad ganará un buen pintor...

graciosa la anecdota de Esteso comiendo un fuet en el restaurante, va con el personaje, hace poco en la dos repusieron "Yo hice a Roque III" y sigue haciendo reir, Pajares y Esteso estaban muy dotados para la comedia, esas peliculas fueron muy criticadas, pero creo que cumplian perfectamente su funcion, entretener al publico, y ademas no era facil lo que hacian esos dos grandes actores , moverse con esa naturalidad ante la camara y provocar carcajadas en cientos de cines de España, como sucede con la "Colección olé" de Bruguera, para mi con el tiempo, va ganando,posiblemente tambien por que se mezclan recuerdos de los tiempos en que leiamos esos tebeos...

Hablando de cine, recomiendo una que vi anoche: "Los archivos del Pentagono", tecnicamente no hace falta decir que roza la perfección por que estando Spielberg tras la camara pues eso ya es una garantia, Tom Hanks que no es de mis actores favoritos en mi opinion hace uno de sus mejores papeles en este film, y el alegato a la libertad de prensa pues tambien muy logrado, mas si cabe en estos tiempos. en que parece que todo lo que se salga de lo "politicamente correcto" no se pueda decir ...

Saludos!!

Belknap dijo...

Mr. Borgo, es cierto, a los argentinos nos encanta la carne; muy bueno el relato y que seria el ser humano sin la carne. Bueno, cambiando de tema, mucha suerte con la mudanza. Saludos.

miquel zueras dijo...

Hombre, David! Me alegra mucho verte de nuevo.
En ese caso supongo que tus hijos no apreciaran aquel plato típico escocés "Haggis", me pareció como una enorme morcilla hecha con asadura de cordero. He pensado seguir una dieta vegetariana pero como buen ampurdanés no podría prescindir del pescado y en invierno algún estofado tiene que caer.
La mudanza la llevo bien de momento, gracias, y esa portada es una recopilación de cuentos de Kahn (un escritor bastante conocido en los USA) en el titulado "La mudanza" una pareja llega a un piso con una estatua a tamaño natural de un rinoceronte y el contrato les obliga a quedársela. Esa estatua cobra vida por las noches. Qué yuyu...
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Ricard! Me costó un poco acostumbrarme a la carne muy hecha a mí que me gusta sangrante. Donde hacen una cocina muy interesante es en el barrio de Palermo -te lo recomiendo- donde muchos locales hacen fusión con cocina italiana. Los panzerotti y otras pastas, por ejemplo, y tú eliges la salsa para acompañarlas como las trattorias italianas.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Clementine! Estupendo. Tomaremos el té por la mañana y luego salderemos a cazar algo de carne fresca. En mi barrio no hay antilopes pero como está cerca de la montaña de vez en cuando se nos cuela un jabalí.
Muchos besos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Folk? Eso está bien, tomarse la mudanza con calma. Lo de volver a los pinceles es algo que tengo pendiente hace tiempo, lástima que cada vez hay menos locales donde exponer. Yo solía hacerlo en el bar Raval (ya desaparecido) donde acudía toda la peña de Makoki: Carulla, Nazario, Borrallo... y hasta el gran Vázquez.
Eso hizo Esteso, pedir un cuchillo y un fuet y ñam, ñam, se lo pulió todo. Cuando estuve en Florencia me topé en la tele del hotel con su película "Peppone, il macchio de la piscina" (Pepito Piscinas) Era curioso verlo doblado al italiano.
Me apunto esa de los archivos del Pentágono que todavía no he visto. Para cuando haya desembalado todo, que me llevará un tiempo...
Saludos!
Borgo.

Marcos Callau dijo...

Buenísimo. Un gran relato este "Carnívoros" me ha encantado. Que fama se han granjeado con esto de la carne los argentinos. En Zaragoza acudí una vez a un restaurante argentino de mucha fama y no me gustó nada la carne. También parecían fomentar el veganismo jajaja. ¡Vaya notición lo de la mudanza Miquel! No tenía ni idea. Mucho ánimo con ello. Como sabes, yo ya me he mudado por quinta vez, hace poco. No me gustan nada las mudanzas excepto por lo que suponen: el comienzo de una nueva vida. Te animo mucho en tu proyecto de volver a pintar. ME gustaría ver pronto obras tuyas. Dese Zaragoza te envío un fuerte abrazo, amigo y espero que pronto puedas visitarme o visitar yo Barcelona. Hasta pronto!

Frodo dijo...

jajaja no desperdiciaste ni una línea en el relato, todo es bueno.
Ese final no nos deja nada bien, pero se nota que nos conocés, a los argentinos no nos importa si se habla bien o mal de nosotros (o de nuestra carne), solo nos interesa que se hable de nosotros.
¿habrá tenido algo que ver tu amigo Sergio con la creación del relato?

Con tu permiso te "afano" el dibujo del jamón para mi próxima entrada sobre Magritte. Hago mención a tu creación, porque es tuyo ¿no?

Acerca del kabileño, qué miedo. Me imagino que te tocan el timbre y aparece un tipo todo así vestido... después del cagazo que te pegás, te dice "perdón, ¿no es acá la fiesta de disfraces?

Todo muy bueno, como siempre
Abrazo maestro!

David dijo...

Hay Haggis versión vegetariano...Lo probé y la verdad es que sabe igual que el tradicional que probé el año pasado. Mi hijo pilla ahora ese haggis cuando le apetece.

abril en paris dijo...

Tampoco me gusta pensar en la carne que me como (cada vez menos)en su forma original ni en el sufrimiento de los animales para llegar a nuestras cocinas. Un modo de escaquearme de ese sentido de "culpabilidad" es comprar todo de modo que no me lo recuerde e ir añadiendo más ensaladas y legumbres a mi dieta...pero vegetariana no me veo, me gusta demasiado el jamón y los huevos rotos.
Pintar es un gusto y un engorrio a la vez...yo al menos que lo embadurno todo.

De mudanza te hablaria...ya llevo cuatro. Creo que de momento y por mucho tiempo no hay ninguna en el horizonte...son agotadoras...pero suelo cambiar muebles y esas cosas con lo cual me parece que cambio "de casa" de vez en cuando.

Feliz mudanza, amigo

Saludos

miquel zueras dijo...

Hola, Mr.Belknap! Recuerdo con nostalgia aquellos asadores libres y mi sorpresa al ver que en el mercado de Progreso sólo habían dos pescaderías. Cuando paseaba por Caballito al atardecer de repente el barrio olía a asado. Una sensación tribal y única.
Gracias y saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Marcos! Los argentinos que conozco desconfían de los locales argentinos de Barcelona. Con mi amigo Sergio compramos las piezas (vacío, chorizos, churrasco...) en una carnicería argentina y lo hacemos en casa. Tienes que venir un día para compartir nuestros asados.
Empezar una mudanza es como vivir una nueva etapa, de momento lo llevo con ilusión. Yo también espero que nos veamos pronto cuando haya arreglado este follón de cajas y embalajes. ¿Tendrá fantasma esa nueva casa o algún embrujo aunque sea poca cosa?
Abrazos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Frodo! ¿C´mo pedir a los argentinos que renuncien a su carne? Ahora mismo daría cualquier cosa por una colita de cuadril o unos chinchulines, y acompañado de la película "Carne" de Sarli en mi DvD. Todo un ritual. Eso, como decía Oscar Wilde tanto da si hablan mal o bien de nosotros, lo peor es cuando no hablan.
Encantado de que afanes mi dibujo. Era una ilustración que hice para El Periódico para un articulo sobre alimentos transgénicos. Parece un lamón pero ¿es un jamón realmente?
Creo que me iré a Ibiza o a cualquiera de esos sitios turísticos y cuando vea un extranjero tomando fotos le diré que se ha apropiado de mi alma a ver si cuela. En cuanto al kabileño espero que no se ponga a regatear, eso se les da muy bien.
Abrazos, Frodo!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, David! ¿Un Haggins vegetariano y que sabe igual? Ostras, pues ya tiene su merito conseguir que un plato preparado con asadura de pulmón, estómago, hígado y corazón tenga el mismo sabor en versión vegetal.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Abril? Creo que somos muy afortunados al no tener que matar ni desollar la carne que comemos como he visto hacer en casa de mis parientes en el campo. La cocina con conejos colgando boca abajo... parecía la matanza de Texas. Yo soy más de carne cuando hace frio, ahora me dedico más a las ensaladas y un buen pescado a la brasa.
De momento pintaré con acuarela y acrílico. Al oleo no, que pringa mucho.
Uf, cuatro mudanzas. No está mal... tiene su parte atractiva, empezar una nueva etapa y hacer amigos nuevos (lo que me decían cuando cambiaba de colegio)
Gracias y saludos!
Borgo.

AMALIA dijo...

Me dan mucha pena los animales y como poquita carne. Te confieso que me gustaría hacerme vegetariana.

Me ha gustado mucho tu relato porque tienes una forma muy bonita y amena de contar las cosas.

Suerte y paciencia en tu mudanza,

Y un abrazo, Feliz semana.

miquel zueras dijo...

Hola, Amalia! Si tuviera que cazar seguro que sería vegetariano. Con el calor me vuelvo mucho más de pescado.
Me alegra que te haya gustado el relato que, por cierto, se me ocurrió en un asador argentino. Ya he terminado la primera fase de la mudanza: embalarlo todo. Mi piso es muy minimalista ahora, un sillón, una cama y poco más.
Abrazos y muy feliz semana!
Borgo.

Macondo dijo...

No sé cuántos años hace que hiciste la mili, pero un 66% no me parece demasiada revalorización para un alma. Yo le atornillaría un poco más en el precio.
Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Macondo! La foto es del 83, cuando las antiguas pesetas (como dicen en los telediarios) Tendré que mirar como está el tema de la cotización de almas, a ver si me llevo un buen porcentaje. Según la película "21 gramos" este es el peso del alma.
Saludos!
Borgo.

Recomenzar dijo...

Un placer venir y leerte. Los colores humores y comidas te hacen el pintor del dia en tu blog
abrazos van

miquel zueras dijo...

Hola, RECOMENZAR! La comida y el humor... qué importantes que son y qué haríamos sin ellos. La alegría y las fiestas se celebran con comida, y yo celebro que me visites.
Abrazos!
Borgo.

DULCINEA DEL ATLANTICO dijo...

Muy bueno tu relato Miquel creo que muchos pensamos hacernos vegetarianos igual que tus protagonistas cuando nos enteramos de ciertas cosas.
Siempre me llamó la atención esa idea que tienen algunas culturas de pensar que por hacer una foto se roba el alma, y si las roba luego donde las mete.
Que te sea leve la mudanza,es algo que en algún momento de nuestra vida tenemos que pasar, así que ánimo.
Las viñetas muy buenas, eres un artista.
Un abrazo
Puri

JLO dijo...

Apenas empezar a leer y me imaginé el restaurante en argentina!! Jaja... Aunque justo yo no soy tan carnívoro... Por supuesto que esa franquicia fracasaría rotundamente por acá ha... Abrazo carnívoro!!!

miquel zueras dijo...

HolA, Dulcinea! Tengo un amigo cazador (aún así, amigo) que dice ser un "Cazador sostenible" pues come lo que caza, pero no me convence. Me ha invitado varias veces a cazar jabalíes y no creo que acepte.
Ahora he recordado el caso del explorador Guido Boggiani al que mataron los indios paraguayos por hacerles una fotografía, lo enterraron junto con su cámara, creyeron que les robaba el alma al ver su cuerpo en la foto.
Muchas gracias por lo de las viñetas y por tus ánimos. Tengo muchas ganas de acabar, llevo días acarreando libros ¡cómo pesan!
Abrazos, Puri!
Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, JLO? Yo he pensado en el asador libre de Costa Tigre donde descubrí los chinchulines. Pues conozco a un chef que ha abierto un restaurante de pescado en Puerto Madero y dice que no le va mal.
Abrazos omnívoros!!!
Borgo.

Licantropunk dijo...

Ese relato es un ejemplo de lo políticamente correcto que nos invade y de los mensajes que duran lo que dura la noticia en el telediario: lo importante no es el viaje del "Aquarius", lo que cuenta es dónde estarán sus pasajeros al cabo de unos meses.
Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Licantropunk! Antes a todo el mundo que venía a comer a mi casa les parecía bien lo que les ponías, ahora he de informarme si hay algún vegano o un cilíaco... el último vegano que vino a cenar se pulió casi entera una botella de whisky, claro que el whisky no es de origen animal.
Saludos!
Borgo.

Ana Bohemia dijo...

Muy buen plan en de los veganos encubiertos, pobre cuadrúpedo jaja, pedir que le comen con tanta resignación.
Me ha gustado la foto, el tiempo siempre hace que se conviertan en algo especial. 100 euros por devolverme el alma no es mal negocio.
Un abrazo Miquel, 😃

miquel zueras dijo...

Hola, Ana! Es que las estremecedoras fotos de mataderos y animales hacinados en granjas ya no causaban efecto y había que buscar un plan más astuto pero efectivo.
Esos 100 euros no me vendrían mal ahora que me acabo de mudar pero tengo una duda ¿cómo se envuelve un alma para regalar? Creo que aún guardo papeles de la pasada Navidad.
Abrazos, Ana!
Borgo.