jueves, 28 de noviembre de 2019

FREAK SHOW

Cuento escrito a cuatro manos con Mudit, profesora de danza y escritora.

El programa se llama Triunfo Freak. El show premia con una importante suma al fenómeno de circo más impactante. En el estudio de grabación hay muchos entre el público –enanos, gigantes, siameses, hombres cocodrilo-… todos con la misma camiseta roja con las letras TF.
Una voz atronadora anuncia el siguiente concursante. Las cámaras preparan el zoom, las luces centellean sobre el escenario y… el desconcierto se extiende por el plató. El público se apretuja para ver mejor al recién llegado formando un mohín rojo en mitad del estudio. ¡El concursante es normal! Bueno, lo más llamativo es que su rostro es idéntico al de Leo Messi.
 El jurado –un hombre torso, un niño camello y una mujer barbuda- cuchichean entre ellos juntando las cabezas que forman un centro peludo. La mujer barbuda se pone en pie agitando las miles de lentejuelas brillantes de su ajustado vestido y dice:
-Caballero, me temo que no ha entendido bien las bases del programa – se pone una mano a modo de visera para ver más allá de los focos-. Su parecido con Messi es impresionante, pero esto no es un concurso de dobles de famosos. Buscamos fenóm…
La mujer barbuda calla al ver que de repente la camisa del hombre normal empieza a abrirse desde dentro y con el último botón aparece una segunda cabeza que asoma desde su abdomen. La cabeza habla con acento extranjero:
-Yo soy el concursante. No hablen con ese –señala a la otra cabeza-,  es mudo y sólo entiende esloveno.
La música suena a todo trapo, y todos –público y jurado- aplauden con entusiasmo.
FIN
MARC RIBOT
MELMOTH. EL ACTOR  
El actor tenía que interpretar un papel en el que un oficial jugaba a la ruleta rusa en el tercer acto. El personaje hacía una apuesta y, naturalmente, la ganaba. Disparaba el arma sin matarse.

 Para aderezar el asunto, pero sin confiárselo a los otros miembros de la compañía, el actor introdujo una bala auténtica en una de las recámaras del arma que utilizaba en escena. Sin saberlo los demás, el actor se jugaba la vida en la escena todas las noches. No se sabe muy bien las motivaciones que condujo al actor a semejante extravagancia, quizá por penas de amor, fanfarronada o melancolía profunda.
Por una suerte extraordinaria, actuó en las veintidós primeras representaciones sin incidente. Salió indemne todas las noches. La mañana del vigésimo tercer día, postrado por una fiebre muy alta, le fue imposible levantarse de la cama. Envió aviso al teatro para informar al director. Este llamó inmediatamente al sustituto del actor y lo puso a trabajar para que pudiera actuar aquella misma noche. El sustituto, con gran alegría, iba a actuar por fin, ensayó todo el día, se vistió enseguida con el traje del actor enfermo, cogió su arma y, para enorme sorpresa de todos, se mató aquella noche en el escenario.
El actor abandonó la cama dos días después para asistir a los funerales de su sustituto. Cuando el actor se recuperó de su leve enfermedad, volvió a su papel, dejó de introducir la bala en la recámara y se dio a la bebida.
FIN
RECETA: DORADA FELIZ
El nombre se me ocurrió al sacar la dorada del horno, me pareció que sonreía feliz.
Pedir en la pescadería que preparen una dorada para el horno (vaciarla y quitarle las escamas) En la bandeja añadir sal, 1 rodaja de limón, 1 hoja de laurel y rociar con aceite de oliva.
Introducir en el horno a 180º. Cuando empiece a tomar color verter 1 vaso de vino blanco y seguir cociendo 20m.
Y es que los peces también ríen, ¿porqué no?



lunes, 18 de noviembre de 2019

EL WALKING DEAD DE LOS PITUFOS


 En 1963, cinco años antes de que George A. Romero estrenara La noche de los muertos vivientes, se publicó el primer álbum protagonizado por los Pitufos que hasta ahora aparecían como secundarios en las aventuras de Johan y Pirluit: Los Pitufos Negros. La aldea de los Pitufos se ve aquí asediada por Pitufos Zombis o quizás sería mejor decir infectados, que no es lo mismo. Todo empieza cuando una extraña mosca pica a un Pitufo que pierde su habitual color azul para volverse negro y rabioso.
Papá Pitufo dice cosas que hoy se considerarían políticamente incorrectas. El venerable Pitufo también sucumbe a la plaga. Los Pitufos se infectan mordiéndose en la colita, lo que se ha interpretado por algunos como una solapada alusión a la homosexualidad de los personajes creados por Peyo; claro que eso sucedía antes de la aparición de la rubia y dulce Pitufina.
Las hordas de Pitufos Negros se dirigen hacia la aldea para contagiar a todos los supervivientes.
 En el año 2009 se reeditó el álbum con notables modificaciones. Los Pitufos Negros pasan a ser morados -The Purple Smurf- para evitar acusaciones de racismo.
ENTRAÑABLES ESCENAS EN EL SUPER (1) Marc Ribot.
Melmoth nos regala otro de sus Haikus.
LA LLUVIA
Un hombre camina lentamente bajo la lluvia. Un transeúnte apresurado le pregunta:

- ¿Por qué no caminas más aprisa?
-También llueve delante – contestó el hombre.



LA RECETA: CALLOS (Mondongo, para mis amigos del otro lado del charco)
Sí, ya sé que los platos de casquería tienen muchos detractores, pero miren que buena pinta tenían:
Yo compro tripa o callos de los amarillos. Sofreír en aceite y 1 cucharada sopera de pimentón picante. Cuando tomen color sazonar con sal y pimienta y añadir chorizo cortado en taquitos. 
Remover, añadir 1 vaso de vino blanco, tapar la sartén o cazuela y dejar cocer con el fuego al mínimo unos 20 minutos. Los suelo acompañar a la portuguesa, con arroz blanco, recordando a Pessoa:
"Un día, en un restaurante, fuera del espacio y del tiempo,
me sirvieron el amos como callos fríos.
Delicadamente dije que los prefería calientes.
Que los callos, a la manera de Oporto, nunca se comen fríos."

lunes, 4 de noviembre de 2019

LA PEDREA. Relato y más cosas...


 El 22 de diciembre Ildefonso consultó los resultados de la Lotería de Navidad. Le había tocado la pedrea. “Bueno, algo es algo.” Pensó.
Recibió un correo electrónico indicándole donde recoger el premio: “Administración nº 554. Calle Jackson. Avise con 24 horas de antelación y traiga su boleto y el DNI.”
Era en una calle del extrarradio. Ildefonso se sorprendió al ver un numeroso grupo de vecinos reunidos en la puerta del local. Algunos le sonreían. “Ni que me hubiera tocado el gordo”, se dijo.
El dueño de la administración salió a recibirle, comprobó sus datos y se dirigió a la multitud: -¡El ganador de la pedrea!!!-  justo antes de apartarse bruscamente.
Entonces Ildefonso advirtió que todos los vecinos llevaban piedras, algunas bastante grandes que sostenían con ambas manos mientras que los niños portaban una piedra de menor tamaño en cada mano.
El administrador tocó un silbato. Un pedrusco le golpeó en la sien. Al instante cayó sobre él una lluvia de piedras.
FIN
Marc Ribot está inspirado y me ha traído un par de textos:
Melmoth vuelve con los caracoles. Un haiku:
Un caracol japonés subía lentamente por el tronco de un cerezo. Era febrero, o quizá marzo. El caracol se encontró con una rana que le dijo: 

-Pero ¿adónde vas? ¡No es temporada! ¡No hay cerezas todavía? 
El caracol contestó sin detenerse:
¡FELIZ HALLOWEEN! (Con retraso)
TALLARINES CON CREMA DE CALABACINES Y ESPARRAGOS.
Cortar en dados pequeños los calabacines con su piel. Cocer los espárragos al dente y cortarlos a trozos. 
Saltear las verduras en aceite y añadir 1 brick pequeño de crema de leche (200 ml) y 1 cucharada de parmesano rallado. Remover y apagar el fuego.
Cocer los tallarines en abundante agua salada, escurrir y mezclar con la salsa.