miércoles, 18 de septiembre de 2019

OTRO POST QUE SE LEE MUY RÁPIDO

CORDERO CON PIEL DE LOBO

Los hombres lobo también tienen sus ratos de hombre corderos. Esos ratos ella aprovecha para ser despectiva, agobiarle y hacer con él lo que le de la gana. 
Es una estrategia,  sabe que cuanto más rencores acumulara él con más fuerza le haría el amor al convertirse en hombre lobo, y hoy hay luna llena.
No hay nada como las reconciliaciones a lo salvaje.
HOMBRES LOBO EN LONDRES
En este restaurante que han abierto en mi barrio me siento como en casa.Se come bien y me encargarán un logo.
Marc Ribot ha vuelto de sus vacaciones:
UCRONÍA
Y ahora el turno de Melmoth:
Alguien llama a la puerta, pero cuando la mujer abre, sólo ve un caracol. Lo coge, y lo tira al jardín. Dos semanas después, llaman de nuevo a la puerta. La mujer la abre y se encuentra otra vez con el caracol, que dice:
...Y un plato rápido: ESPAGUETIS RÁPIDOS DE MEDIANOCHE
Doy fe de que existe un plato con ese nombre, lo tomé de un libro y lo he simplificado:
Recomiendo emplear un tomate entero de lata. Cocerlo en la sartén con una guindilla a la que hemos quitado las semillas y aplastarlo con una cuchara de madera hasta que se deshaga.
Cocer la pasta en agua salada, escurrir más bien "al dente" y condimentar con un chorro de aceite de oliva y la salsa de tomate después de quitarle la guindilla. Servir con parmesano rallado.



34 comentarios:

Campirela_ dijo...

Como siempre tus entradas son divertidas y muy interesantes , ambos relatos cortos tienen su misterio es decir leamos más allá de lo que dices ...Hombres lobos , corderos y luna llena una buena mezcla para que de ello salga algo digno de mención ...
La receta sabrosa y fácil un buen plato ..
Y con esto te digo amigo que tengas mucha suerte en tu proyecto .
Abrazos !!.

Macondo dijo...

Además muy variado y entretenido, como siempre.
Un saludo.

El Doctor dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
El Doctor dijo...

Un buen microcuento. Profundo. En el libro “El amor dura tres años”, del gran Fredéric Beigbeder me dejó de piedra cuando leí esta frase: “Una historia de sexo puede convertirse en una historia de amor, pocas veces ocurre lo contrario”. No he leído nunca una cosa tan sabia, atrevida y contundente. Y es cierto. Los mejores polvos son aquellos que se realizan sin cita previa o cenas con velitas. Desgraciadamente no ocurre con frecuencia, pero son esos los que no olvidamos. Dos se miran a los ojos. Acaban de conocerse y no hay nada más que se interponga entre ambos. ¡Ñaca!

Tenemos la manía de preparar el coito con antelación, como los malditos proyectos que echan a perder al ser humano. Los corderitos con piel de lobo, que es lo que somos, caemos de inmediato en las redes de lo convencional. Quedamos atrapado por alguien (es lo mismo que sea hombre o mujer), vienen los preparativos, los malos papeles de la función teatral, promesas imposibles. Luego las presentaciones de los padres. Ves en el suegro o la suegra cómo será tu pareja de mayor. La estabilidad laboral siempre tan inestable, la hipoteca, viendo series de Netflix con una manta de cuadros sobre las piernas, los niños, las facturas, las vacaciones obligadas, más cenas con los suegros y cuñados, etcétera. Corderitos en la piel de lobo atrapados por el cepo social. A tomar por el culo el lobo y la loba.

Tenemos que ir a ese restaurante, amigo Miquel. Quizá después de haber ido al último restaurante chino. Estaría bien ir una vez tenga ese “Borgo San Jacobo” tu logo, que seguro que es genial.

Muy bueno, tanto el dibujo como el gag de Ribot. Creo que hoy estamos ya viviendo ucronías diversas bastante delirantes.

Me encanta ese dibujo del caracol. Me gustan mucho esas historias donde los animales, no humanos, se preguntan con toda inocencia sobre las tonterías cometidas por los animales humanos.

Joder, ¡comer espaguetis a medianoche! Creo que mi estómago ya no lo aguantaría. Uno se da cuenta que se hace mayor en tres cosas: en lo que cenas, cuando te levantas de la cama y en el débito conyugal.

¡Un fuerte abrazo!

Frodo dijo...

¡Grande Borgo! Esta entrada fue cortita pero implacable.
Acerca del relato de hombres Lobos y hombres Corderos, te recomiendo que escuches el disco doble de Los Redondos, "Cordero Atado Lobo suelto"... ese que tiene Yo Caníbal que tanto te gusta. Si hay algo que me enseñó ese disco, es que a veces no hay tanta diferencias entre un lobo y un cordero.

https://www.youtube.com/watch?v=XF5Ciawe7y8&list=PLDV-yzIbJAxbjKXwBkM89S_5zGHzNj07B&index=1

Me encantó esa canción con aullido. La desconocía por completo.

Por supuesto que te obligo (no te invito, ni te recomiendo) te obligo a mostrarme luego que tal queda el logo. Voy a ir al kiosco que se llama Frodo en Flores, a ver si puedo hacerles el mismo laburito.

Ribot ha estado exquisito. ¿qué hubiese pasado si ocurría eso no? Aunque hay que se llega a destinos parecidos por diferentes senderos... hoy no hay tanta diferencia entre un republicano y un demócrata (y retrotraemos a aquello de lobos y corderos)

Esta vez mi premio va para Melmoth, me ha causado mucha gracia, un humor más directo más inocente pero muy inteligente también.

ambos siempre acompañados por tu magistral lápiz.

La receta esa me hace pensar en el bajón de un faso de "faso"... podrías modificar apenas la última ilustración jajaja

Abrazo gigante crack!

AMALIA dijo...

Ese logo te quedará magnífico.
Mucha suerte.
Muy amena tu entrada. Y la recetita fácil y, seguro, buenísima.
Un beso. Feliz fin de semana.

ethan dijo...

Me gustan estos posts rápidos y brillantes como un rayo. Todos los microrelatos son magníficos y los dibujos que les acompañan muy expresivos. Las reconciliaciones son estupendas, los caracoles lentos y la historia es tan inevitable como el destino (ese partido se canceló, seguro).
Saludos!!

Doctora dijo...

Pienso que si Lincoln hubiera ido al fútbol le hubiesen matado igual los de los asiento de atrás, que no verán nada por culpa de su sombrero de copa ;P

Saludos!

miquel zueras dijo...

Hola, Campirella! Hombres lobo y un asado de cordero en noche de luna llena. Sí, por aquí saldría una buena combinación.
Receta rápida pero he olvidado un detalle: un cucharón del agua en la que hierve la pasta a la salsa, me lo enseñó un chef italiano y le da muy buen sabor.
Muchas gracias. A ver si estoy inspitaso, y gracias por pasarte por aquí, Campi.
Abrazos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

¡Muchas gracias, Macondo!
Y tú sigue haciendo esas revisiones tan ingeniosas de refranes populares.
Saludos!
Borgo.

Fran dijo...

Que tal Miquel!
Estupendo como de costumbre el post. Estoy deseando ver ese logo, seguro que va quedar muy guapo. Me encantan los spaguetti en todas sus formas.
Saludos!

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Melmoth? Me encanta esa frase de Beigbeder a la que no le falta razón. Sí, el "coito" (qué palabra tan fea, por Dios, sólo superada por "cópula") cuanto más se palnea suele salir peor, como los viajes. No me imagino al lobo comiendo paella en casa de la suegra a menos que ella fuera el postre. Los lobos disfrazados de oveja nunca dejarán de ser lobos, pero la sociedad ya se encarga de convertirnos en corderos con piel de cordero.
No está mal ese restaurante "borgiano". Son sicilianos y hacen unos "cannoli" que devoré con tanata avidez como Eli Wallach en "El padrino-3".
Yo también creo que vivimos en una ucronía permanente, con saltos adelante y atrás en el tiempo como el Billy Pilgrim de "Matadero-5" Ese Vonnegut sí que sabía...
¡Abrazos, Melmoth!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Frodo! Ahora escucharé esa canción de los Redondos. Seguro que me gusta como todo lo que me pones de enlace.
Ah-hooo, werewolves of London!!! Un tema de Warren Zavon que formó parte nada menos de la banda sonora de "El color del dinero" de Scorsese.
Estoy aguardando a que me den alguna instrucción sobre el logo. A mí me encantan las ucronías, eso de "qué pasaría sí..." Melmoth nos regala otro relato con esa ironía surrealista que domina como nadie.
Cuando aquella alucinación de hierba que tuve en Cabo Verde ya me habría gustado ver los espaguetis danzando...
Abrazos, amigo!
Borgo.

ricard dijo...

Muy inquietante lo del hombre cordero, me pregunto si mi esposa conoce esa leyenda.

Muy bueno todo, pero la cancioncilla, lo mejor. Y eso que no la recordaba de la película de Scorsese...

Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Amalia! Bueno, me ha quedado como uno de esos blogs poti-poti con un poco de esto y de lo otro...
Es una receta muy sencilla, pensada para improvisar algo a medianoche.
A ver qué me pedirán de logo. Al menos tengo experiencia en dibujar espaguetis.
Besos, Amalia y muy feliz fin de semana.
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Ethan! Es el estilo de ahora, todo rápido y breve, un "fast post" que se puede ver en cualquier momento. Reconciliaciones rápidas y caracoles lentos, buena combinación, sobre todo con lo que me gustan los caracoles al horno (a la llauna, decimos aquí) Planteas otra posible ucronía: ¿y si el partido se hubiera suspendido?
Saludos y buen fin de semana, Ethan!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola

miquel zueras dijo...

¡Muy bueno, Doctora! Me ha hecho reír mucho ese pedazo de historia alternativa que has añadido. Sí, eso no le habría pasado en el teatro donde el presidente Lincoln tenía su palco privado. Increible la historia de su asesino, Booths, la mayor promesa del teatro americano de entonces.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Fran? Me alegra mucho que te haya gustado. A ver si estoy inspirado para el logo que es un trabajo de esos de dibujo fácil pero complicado.
Espaguetis rápidos para cuando uno llega tarde a casa. Sólo se necesita para acompañar la pasta tomate y guindilla. Un poco de agua de la cocción de los espaguetis le queda bien a la salsa.
Saludos!
Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Ricard! Yo en tu lugar no le hablaría de esa leyenda.
Esa canción de Zevon me encanta. Ese músico era todo un personaje, lástima que muriera joven a causa de un cáncer. Se le atribuyen frases célebres como esta: ""Perdone, tengo un cáncer terminal, ¿podría hacer que la cola fuese un poco más rápida?" (a la cajera de un supermercado).
Saludos, Ricard!
Borgo.

Clementine dijo...

Maravilloso post, nadie como tú para rellenar una entrada a pinceladas. Me chifla el primer mini relato, jajajaja... Y tus dibujillos. ¡Y bravo por ese encargo!
Muchos besos, Borgo y muy feliz fin de semana.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Clementine? Me ha salido como uno de mis clásicos poti-poti pero en rápido. Los de ese restaurante no me podían fallas llamándose Borgo, ¡son de la familia! aunque no quiero decir con eso que sea un restaurante de la mafia.´
Besos y muy buen fin de semana, Clementine!
Borgo.

brenllae9@gmail.com dijo...

Lo que habría cambiado l historia con ese partido de fútbol en vez de una obra de teatro. Me alegra que te hayan ofrecido lo del logo, también te puedes ofrecer para hacer spaguettis rápidos de medianoche. Ja, ja, ja. Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Brenllae! Sí, o en el caso de que en esa época se hubiera inventado ya el cine y Lincoln hubiera ido a una multisala, en esa chistera deben caber muchas palomitas. Me gustan esas tramas de "que hubiera pasado sí..."
Ya me he puesto con el logo. Pues no es mala idea, logo y unos espaguetis rápidos, aunque no sea medianoche. Yo encantado pues echo de menos trabajar entre fogones.
Saludos!
Borgo.

Nocturno dijo...

Buenísimo tema musical elegido, muy apropiado al espíritu de la entrada en general.
El restorán se llama Borgo igual que tú? o es una localidad? todo sólo coincidencia?
Concuerdo con las reflexiones de hombres lobo/cordero.
La viñeta del caracol me dejó pensando.
Spaghettis de medianoche, me recordó cuando vivía solo y de repente a las 3 de la mañana tras venir de una fiestita me calentaba esos fideos chinos maruchán, lo más cercano a fideos de media noche jeje.
Un abrazo master.

miquel zueras dijo...

Hola, Nocturno! Me encanta ese tema de "Werevolves on London", lo descubrí en la banda sonora de la película "El color del dinero" de Scorsese.
Hay muchas localidades con ese nombre en Europa -sobre todo en Italia- viene del latín "Burgus", así llamaban a las ciudades que se construían en torno a los castillos.
Supongo que los hombres-cordero se transforman en las noches de luna nueva.
Sí, es un plato que suena a improvisado, el nombre ya lo dice: "rápidos de medianoche" que también suena a sexo apresurado.
Abrazos, Nocturno!
Borgo.

Ana Bohemia dijo...

El periodo de hombre cordero del hombre lobo debe ser algo así como tener la menstruación, pobre, buena táctica la de ella.
Me exploté de risa con lo del caracol, es buenísimo.
El que inventó la receta no se mató mucho buscándole un nombre, ya sabemos cómo, porqué y a que hora se le ocurrió...
Saludos Miquel
:)

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Ana? Pues es un buen ejemplo ese, no se me había ocurrido. Dicen que las reconciliaciones tras una crisis son lo mejor de una relación, ese hombre-lobo-cordero nos lo podría confirmar.
Melmoth domina como nadie los microrrelatos surrealistas. Vaya excursión que se hizo el caracol.
también hay unos espaguetis ("Alla Alfredo") con aceitunas y coñac que los italianos suelen comer de noche, lo vi en la película "La dolce vita" y es una receta auténtica.
Saludos, Ana!
Borgo.

Mamen dijo...

Hola, Miquel
Mis vecinos, son todos lobos con piel de cordero.

Muy buena entrada.
Saludos!

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Éowyn? Me alegra mucho volver a verte por aquí.
¿Lobos con piel de cordero? Mal asunto, con esos no sirven ni las balas de plata.
Muchas gracias, Éowyn y hasta la vista!
Borgo.

Nocturno dijo...

Mándame tu correo en blogger a esta cuenta para dejarte como lector invitado ;)

franklyhappycat@gmail.com

miquel zueras dijo...

Muy bien, Nocturno! Y gracias. ☺ Borgo.

Julia López dijo...

No se cual de las tres me ha gustado más, no me decido, pero en fin, la primera porque nos demuestra que el peligro puede estar en cualquier parte, donde menos te imaginas.
Abrazos

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Julia? El peligro siempre es más peligroso cuando es inesperado. Lo que más aprecio es que te hayan gustado mis historias. Me encanta poner micros o "gags" como los llama Melmoth que se leen rápido, y mejor con un dibujito.
Abrazos, Julia y gracias por pasar!
Borgo.