jueves, 6 de marzo de 2014

CAFÉ Y UN RELATO RECHAZADO

Además de la portada y unos dibujos interiores para este libro he presentado este relato corto. Lo han rechazado alegando que no encaja con su línea. Bueno, les parece demasiado heavy:
CORNELIUS EXPRESS
 Una vieja gitana preguntó a Emma Stribling: “¿Quiere que lea los posos de su café, señora? Es sólo la voluntad”. Emma aceptó conmovida por el desaliñado aspecto de la anciana. Cuando la gitana examinó los posos su expresión pasó de perpleja a horrorizada, se santiguó apresuradamente y abandonó el local a grandes zancadas profiriendo gritos en caló. Emma decidió ir en adelante a otra cafetería.
-¿Solo una taza de agua hirviendo? –inquirió el camarero.
-Cóbremela al precio de un café –Emma ilustró sus palabras con una sonrisa-. Solo puedo tomar esta marca de soluble –y sacó un sobrecito de su bolso.
Emma Stribling era una persona poco convencional. Antropóloga y con un marido, Cornelius, de la misma profesión, vivieron durante años con los Beri-Beri;  una tribu de la Micronesia.  Siguiendo las nuevas tendencias, no intentaron modificar sus costumbres, al contrario. Convivían con ellos en sus chozas de barro endurecido y resquebrajado.
Cornelius sucumbió a las fiebres, pero antes expresó su deseo de que su funeral se hiciese según el rito Beri-Beri. Esa tribu incineraba el cadáver, después trituraban los restos hasta convertirlos en cenizas y polvo que luego hervían en una marmita. Los parientes acudían con sus cuencos para tomar esa infusión como póstumo homenaje.  Emma era la única pariente de Cornelius.
Emma apuró la taza humeante de un sorbo, un ligero temblor recorrió su cuerpo, se alisó el vestido a la altura del pecho y pidió otra taza de agua hirviendo.
Había decidido tomar otro de lo que en un genuino rasgo de británico humor negro llamaba Cornelius Express.
Solo y sin azúcar.
ESPAGUETIS CON SALSA DE CAFÉ

En este libro hay algunas recetas tan curiosas -y fáciles- como esta:
Ingredientes: Espaguetis, nata para cocinar, parmesano rallado, mantequilla, 1cucharadita pequeña de café molido -no vale nescafé-, pimienta molida abundante.
En una cacerola rehogamos con fuego bajo el café en mantequilla. Añadir la nata y el queso. Sazonar con sal y pimienta recién molida. 
Cocer la pasta en abundante agua salada y escurrir sin que quede totalmente seca. Servir inmediatamente con la salsa de café por encima.
EL CARAJILLO PERFECTO

 Me gustan los carajillos cuando hace frío, de coñac o de ron, y al fin he encontrado un local donde lo hacen perfecto. Está en Madrid: Café Galdós, Los Madrazo, 10. en Malasaña, muy cerca de Las Cortes. Calientan un vaso con el azúcar, un chorrito de coñac, tres granos de café y un trozo de corteza de limón. Lo flambean y sirven con una ramita de canela. Delicioso.
El nombre tiene su origen en el corajillo, bebida a base de café y ron que los soldados españoles durante la Guerra de Cuba, tomaban antes de entrar en combate. 
Setenta cafeterías de Barcelona participan en algo llamado Ruta del carajillo. Me temo lo peor cuando leo el folleto que han editado: "... al café y al buen brandy se le pueden sumar unas notas de naranja o sirope de higos." ¿¡Sirope de higos!!!? Ay, que quieren cometer con el carajillo las mismas mamarrachadas que hacen ahora con los gin-tonic al que lo disfrazan con pepino, frutas del bosque, flores comestibles y lo que tengan a mano.


54 comentarios:

Javier Simpson dijo...

No sé, pero de entrada rechazo eso del café con pasta; pero seguro que después está de maravilla, como esos carajillos de los que hablas. Es cierto, en invierno sientan muy bien. El relato está bien, miquel, y los dibujos lo mismo, estupendos. Abrazos.

El Doctor dijo...

No está nada mal,además de esos dibujos que tanto me gustan marca de la casa,de verdad.Lo cierto es que hoy se beben menos carajillos quizá porque la gente de la construcción (los que más bebían)ya no son tampoco como los de antes que antes de empezar la jornada llevaban seis o siete,lo sé porque he trabajado en ese oficio.Y no veas,después se subían al andamio como si nada.Hoy está todo muy controlado al respecto. Con esos cascos,las gafas de protección,los guantes,el chaleco fosforescente,parecen extraterrestres.Ya me he salido del hilo narrativo y no sé por donde iba... será el carajillo.

Un abrazo,buen hombre.

Sícoris dijo...

El relato será heavy, pero a mí me ha encantado. No sé qué tiene la gente en contra del humor negro.
En cuanto a los experimentos con el carajillo y los gin-tonic, la máxima debería ser: si no es para mejorarlo, déjalo tal como está.

Ana Bohemia dijo...

Buen relato con sorpresa y corto, y ya se sabe que los británicos tienen un humor muy refinado, algo gris y espeso, como su clima.
Los espaguetis no son mi fuerte y con café no sé yo.
;)

miquel zueras dijo...

Hola, Javier. Confieso que esta receta aún no la he probado pero pienso hacerla este fin de semana, a ver qué tal. Un carajillo matinal en invierno sienta muy bien, sobre todo después de un buen desayuno.
Gracias por lo del relato y los dibujos.
Abrazos. Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Francisco? Sí, esa gente eran más duros que las rocas. Subiendo por los andamios como koalas trepando y en pleno invierno. Aún se estila el carajilo aunque lo que ha caído en desuso es la "barrecha" (2/3 moscatel, 1/3 cazalla) que tomaban nuestros abuelos. Un auténtico dopaje.
Abrazos. Borgo.

miquel zueras dijo...

Gracias, Sícoris. Los relatos de humor negro inglés como los de Saki o Roald Dhal me encantan pero ese libro va muy en tono light. Yo creo que con los gin-tónic se han pasado un pelín. Hasta me lo han llegado a poner con aceitunas arbequinas y una ramita de tomillo.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Ana. Los británicos tienen buen humor, lo que es muy necesario con su clima (viví unos meses en Londres) y no lo han hecho mal desde Wodehouse hasta los Monthy Phyton.
En tu caso no te aconsejo esa receta. Yo pienso hacerla por no decir que no la he probado aunque de entrada no me convence mucho.
Saludos. Borgo.

Belknap dijo...

Mr. Borgo, esto de los carajillos me parecio muy interesante, tendre en cuenta sus recetas; por el lado del cuento y los graficos, ambos muy buenos. Saludos.

miquel zueras dijo...

Muchas gracias, Mr. Belknap! Aunque ahora mismo me tomaría a gusto un mate. Mi preferido es "La hoja" que cebaba con un poco de piel de naranja molida.
Saludos. Borgo.

Mister Lombreeze dijo...

Estupendo relato. Panda de mojigatos. Es de un romanticismo exacerbado. Y muy neocolonialista.
Qué opinas de los quemadillos?.

deWitt dijo...

De todas tus recetas, me quedo con la mortem, una forma como otra cualquiera de pasar a mejor vida. Yo es que soy muy de rituales...

Abrazo

Charly Hell dijo...

Pasta con café... me he quedado de piedra. ¿Y estará bueno? Pardiez, tendré que probarlo, no me quedo yo con esta duda!!!

Lo que no me animo son con los carajillos, demasiado para mi :p

No sabía lo del número Bacon!! jejejeje.

Un saludo y buen finde!!

miquel zueras dijo...

Gracias, Mr. Lombreeze. Me lo temía al ver que la autora tiene su página de facebook tuiteada con mariposas y florecillas.
Tomé los quemadillos en un bar de El Tubo, creo que en la calle Mártires. Buenísimos. Antes los hacían así -más o menos- en el bar de la estación Delicias, ahora se han "globalizado".
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, deWitt. Yo también, y por eso me gustaría acabar convertido en carajillo. De ron, si puede ser con sus granos de café y punto de limón.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Charly Hell. Hoy me he preparado esa receta para comer. No está mal, para probar algo diferente, pero me quedo con las recetas tradicionales: boloñesa, carbonara, roquefort, boscaiola...
Lo del Número Bacon es muy curioso. Creo que le dedicaré un post.
Saludos y buen finde! Borgo.

Doctora dijo...

Muy buena la historia, el canibalismo es que es un poco heavy, sí.

Me recordó el principio a una viñeta de Quino en la que una gitana le tiraba las cartas a un hombre y tras mirarlas asustada le cruzaba la cara de un guantazo y se iba indignada ;P

miquel zueras dijo...

Gracias, Doctora. Sí, supongo que el canibalimo, aunque sea en forma de infusión, aún es un tema bastante tabú.
Vaya, no he visto esa tira de Quino pero me imagino que debía ser muy buena, como todo lo que hace. Eso de ver las interioridades de la gente no ha de ser siempre agradable.
Saludos. Borgo.

Clementine dijo...

El relato es extraordinario, Miquel, tu manera de contarlo y la idea en sí, ingeniosísima. Y no te estoy exagerando nada, te lo digo de verdad, me parece magnífico de principio a fin. Y el resto de la entrada, dibujos, recetas... como siempre, no desentona en absoluto. Tú, desde luego, aburrir no aburres :)
Y ahora sí... muy feliz finde. Besos, Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Clementine? Gracias, me alegra y mucho que te guste el relato. Me dije: ya que no me lo publican pues lo pongo en el blog. Qué bien que va para esas cosas.
Lo que no me ha convencido mucho es la receta de pasta con salsa de café. Bueno, había que probarlo.
Besos y que tengas muy buen finde.
Borgo.

Juan Esteban Bassagaisteguy dijo...

¡Qué buen relato "Cornelius Express"! Disfruté mucho con su lectura: un acertado manejo de incógnitas, amor, humor negro y toques macabros (con razón huyó la gitana, je).
Las ilustraciones, como siempre, rozan la perfección (por no decir "la superan").
¡Saludos!

Gárgola dijo...

Que razón llevas en cuanto a los carajillos, es más difícil encontrar un sitio donde los pongan bien que encontrar el arca de la alianza. Y los gin-tonic. Una vez me tiré más tiempo sacando todo lo que le habían metido dentro que bebiéndomelo. A parte del pepino, llevaba también hojas de menta ¿? y granos de pimienta negra.
Un saludo

Licantropunk dijo...

Pues el relato está muy bien, me trajo a la cabeza imágenes del cine de Jacques Tourneur, de mujeres pantera y hombres leopardo.
Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Juan Esteban. Me alegra mucho que te guste viniendo de otro narrador de ficción como tú. No estaba seguro de dejar la escena de la anciana, quizás quedaba mejor si iniciaba la historia con el camarero directamente.
Saludos y gracias. Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Gárgola. Ese local de Madrid preparan los carajillos como nadie. Lo de los gin-tónics ya roza el delito ¿Te pusieron granos de pimienta? Uf, yo le habría sugerido al camarero donde guardar sus granos de pimienta. Más que gin-tónics parecen ensaladas.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

Hola, Licantropunk. Hombre, me gusta mucho que lo relaciones con esa gran película, quizás por los ecos de la selva que acompañan a los protagonistas de regreso a la civilización... o algo así.
Saludos. Borgo.

Nury ruri dijo...

No soy muy cafetera. Soporto el sabor del café en un tiramisú casero siempre que no sea muy exagerado. Te recomiendo, ya que eres tan cocinillas, que pongas en práctica la que viene en la caja de bizcochos fontaneda (no es que quiera hacerles publicidad, es que queda riquísimo). Soy más de tés, infusiones... y esas corradinas.
No entiendo el rechazo de tu relato, la verdad.
Saludos.

Nury ruri dijo...

Perdón, quise decir chorradinas. Siempre que me pongo con la tablet se me cruzan las letras.

ricard dijo...

El relato está muy bien. Me recuerda un acertijo que ponían en algunos másters de dirección de empresas:

Un señor ciego entrá en un restaurante y pide sopa de tortuga. Prueba una cucharada, pide la cuenta y se va. Al llegar a su casa, se suicida.

Bueno, aquí os dejo, pensando (bueno, al menos tenéis una pista).

Saludos.

miquel zueras dijo...

Hola, Nury. También aparece el tiramisú entre las recetas de ese libro, y un curioso helado de café irlandés que pienso probar aunque los postres no son mi especialidad. Miraré esa receta de Fontaneda, supongo que es un pastel de galleta.
El relato lo calificaron de demasiado duro y "crudo", igual había que hervir más tiempo ese café.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

¡Ja, ja! Pues yo había leído "chorradinas", Nury. Es lo que tiene leer cosas recién levantado.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Ricard? Ostras, muy bueno ese acertijo. No se me ocurre la solución, de verdad, nunca he sido muy bueno en esas cosas. Bueno, te invito a que nos desveles el final cuando quieras.
Saludos. Borgo.

Mario Salazar dijo...

Bueno el relato, me gusta su ironía, y es a un punto una pequeña historia de terror. Me encanta el café, de varios tipos, incluso y mucho el Starbuck. Y la comida italiana, por lo que tu receta y aperitivo suena genial, junto a un buen relato, y los infaltables dibujos. Un abrazo.

Pepe Cahiers dijo...

Ese café es un acto de amor, más juntos imposible. Así que el relato era más bien romántico, no se como se lo han podido rechazar.

Mr. Aris dijo...

Ja ja el relato me recuerda "tomates verdes Fritos"
Como el carajillo, mira que meterle sirope de higos!

miquel zueras dijo...

Gracias, Mario. Es un relato con un toque canibalesco con aroma de café solo. Me alegra que te haya gustado y la receta es una manera original de preparar la pasta.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Cahiers? Esa era mi intención, un acto de romanticismo extremo. El libro sin relato corto ha quedado algo descafeinado, nunca mejor dicho.
Saludos. Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Aris? Es verdad, tiene algo de esa película. Aquí el cadáver no es comido sino tomado en infusión.
Sirope de higos, trozos de pepino en el gin-tónic... hasta trocitos de chorizo le pondrán cualquier día.
Saludos. Borgo.

Pensando en Haiku, Karin Rosenkranz dijo...

Me encantan como hasta el final, me mantienen tus relatos, el Cornelius Express, será un boom si lo patentas y ofreces a la Nesspreso.
un saludo

miquel zueras dijo...

Muchas gracias, Karin, de verdad. Voy a probar si publican el relato en la revista de Nesspreso. Quizás si alguno de los personajes dice eso de: What Else? Hay que ver como ha cambiado con lo del Nesspreso. Ahora todos saben lo que es un capuccino o un ristretto, antes solo había cortado o carajillos.
Saludos. Borgo.

Cristina dijo...

Hola Miquel!! A mi el relato me parece magnífico. Es cierto que resulta un poco sórdido pero las tradiciones muchas veces lo son. Todos conocemos aquí en España una más sangrienta y repulsiva y ahí sigue después de tantas décadas.

Cuando yo trabajaba en la estación de autobuses, me levantaba muy temprano, a las 5 de la mañana, era común compartir carajillo en un acogedor bar que teníamos al lado mismo , y oye era mano de santo para terminar de espabilarte del todo.

Un beso y perdón por la tardanza. Es que últimamente ando algo despistadilla :)

Marcos Callau dijo...

Enhorabuena, es buenísima la portada. El relato sí es heavy pero muy bueno. Ya lo podrían haber incluido. La receta de la salsa de café suena muy bien. Me he reído con la aclaración "No sirve Nescafé" jeje Habrá qu eecharse unc arajillo de ron. Abrazos.

miquel zueras dijo...

Hola, SqS y gracias! A la editorial les parecía bien publicarlo pero la autora opinaba que era demasiado "brutal" (palabras textuales) También se podría ver como un acto de amor, post-mortem, eso sí.
Nada como un carajillo para entrar en calor una fría mañana de invierno a horas tan tempranas.
Me alegra que vuelvas con tu blog, ya me he pasado por allí, sabes que no me lo pierdo.
Besos. Borgo.

miquel zueras dijo...

¿Qué tal, Marcos? Un nostálgico recuerdo a los carajillos "quemaditos" de la Estación Delicias pero seguro que hay otros bares en Zaragoza donde los preparan así.
Salsa de café sin Nescafé, para que no quede descafeinada. Me han recomendado el "Blue Mountain" un café hecho con semillas que una gineta come y después evacúa. No sé... la verdad es que es muy caro.
Cuando quieras nos echamos ese carajillos de ron. Abrazos.
Borgo.

Alimaña dijo...

Ya verás Miquel, en un futuro cercano los carajillos se harán con brandy destructurado y café ecológico de semillas desmineralizadas en un vaso previamente nitrogenado... Vamos, lo que vendría a ser una porquería.

Es curioso que el tema del festival SyFy de este año, creo que sin quererlo, se haya compuesto de entre otras 5 ó 6 películas de caníbales. Esperemos que deje de ser un tema tabú algún día, no desesperemos.

Un saludo

miquel zueras dijo...

Hola, Alimaña. Ya no se respetan ni los carajillos. Parece el post anterior sobre las cosas raras que se tragan la gente de las películas futuristas.
Todo vuelve, me acuerdo muy bien del boom de películas de caníbales de los años 80 con "Holocausto canibal" o "Isla canibal" como las más destacadas.
Saludos. Borgo.

Rita Rodríguez dijo...

Pues a mí me encanta tu relato, tanto como lo carajillos ;-)

miquel zueras dijo...

¡Muchas gracias, eRRe! Me tomo ahora mismo un carajillo de Magno a tu salud.
Saludos. Borgo.

ethan dijo...

Me suena lo de "no encaja en nuestra línea" jajajaja.
El relato me parece muy bueno, nada heavy (a la gitana sí que le espantó jajaja).
Un abrazo

miquel zueras dijo...

Hola, Ethan. Me alegro de verte. Sí, eso de no es nuestra línea o "Demasiado esto" "Es poco lo otro..." En una editorial (Robin Book) me mostraron unos dibujos y me dijeron: "Cópia a ese autor" Le dije: "Pues ahí tienes la fotocopiadora" y me marché.
Quizás la gitana era la lectora de la editorial.
Abrazos y suerte con tu libro. Borgo.

abril en paris dijo...

Ellos se lo pierden, nosotros te leemos y admiramos Miquel :-)
Café o té y además carajillo..umm..a mí me recuerda a ciertos baretos..(nada que ver con Starbuks) en dias frios lo mejor para entrar en calor y si además lleva "ingredientes especiales" lo más de lo más..:-P

Saludos

miquel zueras dijo...

Hola, Abril. No me gustan nada las franquicias y especialmente los Starbucks con esos nombres tan raros: frappuccino, moccalatte, caramel macciatto... y toda la clientela enfrascada con el portátil.
Aquí es donde se añora un sencillo y honesto carajillo en una mañana invernal.
Gracias por pasarte y hasta la vista. Borgo.

Chechu Rebota dijo...

Pues a mi el relato me ha encantado, me parece incluso romántico lo que ella hace por él.
Me ha sorprendido la receta de los espaguetis, me la guardo, ahora tengo curiosidad por saber como sabe esa salsa tan curiosa.
En los años que he trabajado como camarero nunca he visto hacer un carajillo tan elaborado, si vuelvo a estar detrás de una barra debería hacerlo, aunque no haré tonterías como añadirle sirope de higos... a no ser que me obliguen.

miquel zueras dijo...

Hola, Chechu. Yo opino igual, me parece romántico y no tan "crudo" como opinaron en la editorial.
La receta es bastante curiosa, sí, pero no me ha parecido de las mejores para la pasta. Creo que queda mejor con una pasta rellena, como raviolis cuatro quesos.
Yo tampoco he visto -y espero no verlo- lo de sirope de higos pero con los gin-tónics, ya ves... algunos con tanto pepino y fresitas ya parecen ensaladas.
Saludos. Borgo.