viernes, 16 de octubre de 2009

LA BIZARRA MUERTE DE SUSAN CABOT



Susan Cabot fue lanzada al estrellato por Roger Corman en su película La mujer insecto (1960) en la que interpretaba a una experta en cosméticos que se inyecta jalea real para parecer siempre joven y acaba convirtiéndose en un monstruo medio mujer medio avispa. Siguieron más títulos de serie B como Mujeres vikingas o Guerra de planetas.
En 1967 tuvo a su único hijo Tim Cabot –fruto de su relación con el rey Hussein de Jordania que le pasaría una pensión vitalicia- al que los médicos diagnostican enanismo. Aquí es cuando la vida de Susan parece recrear una película de serie B: entra en escena el centroeuropeo doctor Dobkin que recomienda unas inyecciones a base de la pituitaria de cadáveres recientes. El tratamiento tuvo éxito, pero Susan, que sobreprotegía a su hijo de manera enfermiza, inyectó a Tim unas dosis cada vez mayores hasta convertirlo en una especie de monstruo hipertrofiado. Los Cabot vivían sin salir ni comunicarse con nadie en un caserón en las afueras de Hollywood lleno de fotos y recuerdos de la cada vez más desequilibrada actriz (como la Norma Desmond de El crepúsculo de los dioses, pero sin mayordomo) Hasta que un día de diciembre de 1987 al monstruoso Tim se le cruzaron los cables y golpeó a su madre hasta matarla. Vida y muerte al más puro estilo pulp.
Pronto se estrenará en España la película basada en este suceso: Black Oasis, con Rose McGowan -pareja del director Robert Rodriguez- en el papel de Susan Cabot.

1 comentario:

ACID dijo...

La Bizarra esta mal utilizada en este contexto

Bizarro no significa lo mismo que Bizarre (ingles o frances)

No hay que traducir por traducir