Esta semana se presentó en Barcelona Natural Harvest (Cosecha propia) de Paul Photenhauer; un libro con 100 recetas con un ingrediente común: el semen.
“el esperma no sólo es nutritivo, sino que además tiene una maravillosa textura y unas propiedades sorprendentes en la cocina. Como el buen vino y los buenos quesos, el sabor del semen es complejo dinámico. El semen es muy barato de conseguir (...)
Eso nos dice el autor. Algunos platos de ese recetario: café irlandés con extra de crema, chuletas con salsa barbacoa, ostras a lo hombre...
La editorial digital River on Mirror presentó el libro en uno de esos restaurantes de fusión con platos de dimensiones jurásicas y raciones escuetas. Sirvieron un bufet donde el plato principal eran crepes de erizos de mar con esperma... de atún. Me acompañó mi amiga la dibujante Maitena.
-¡Yo no pienso probar esas crepes! -Me advirtió Maitena- A ver si me quedaré embarazada de un engendro mitad pez mitad humano como aquel relato de Lovecraft.
-"La sombra sobre Inssmouth". Mira, Maitena, seguro que eso del esperma de atún es de cara a la galería -Y añadí para pincharla-: Seguro que abrimos la puerta de la cocina y todos los pinches se la están machacando encima de las crepes.
-¡Aaaaggh!¡Cochino! -se horroriza Maitena- Ahora sí que no las pruebo ni loca.
Yo soy un cocinero mediterráneo a la antigua y no me atrae condimentar los platos con mi ADN. Por supuesto que uso crema de lecha para cocinar pero de la President y con recetas como esta:
POLLO A LA STROGONOFF
Cortar las pechugas de pollo a dados y sofreír en la sarten. Cuando se vean cocidas reservarlas y en la misma grasa cocer cebolla picada y champiñones en láminas. Añadir una cucharada sopera de mostaza en polvo Coldman y un vasito de vino blanco, cuando el vino se reduzca un poco verter un vaso de nata (recomiendo President, es más cremosa) añadir los trozos de pollo y dejar cocer con el fuego al mínimo y la sarten tapada unos diez minutos. Servir con arroz blanco. Hale, y que se quite la Lefa Cuissine.
CAMBIANDO DE TEMA
Esta tira la publiqué en el fanzine Tijuana en el 2005. Me temo que vuelve a estar de actualidad.
A mí me pasa como a tí: cuando cocino, procuro poner lo mejor de mí mismo... pero sin llegar a tanto.
ResponderEliminarVaya tela, la gente ya no sabe qué hacer con tal de llamar la atención...
¡Saludos!
Bueno, es un ingrediente hecho con mucho placer y puede que hasta con amor, jajajaja. Que tenga cuidado Sisebuto, que le asaltan la alcaldía.
ResponderEliminar¿Qué tal, Roswell? Esto sí que es cocina que sale del interior. Desde luego cuando me digan en ese restaurante que "El chef vendrá a ponerle su toque personal" salgo por patas. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHostias, sólo pensar en ese café irlandés y se me viene el regüeldo!!! :-))) y eso que me va lo escatológico, pero esto es superior a mis fuerzas.
ResponderEliminarNo, no que es cocina de "interior" está claro.
Saludos
Roy
Eso, Cahiers, como lo que decía la cocinera de "Como agua para chocolate" el ingrediente principal es el amor. Por cierto que el libro se puede adquirir por 21´5 $ escribiendo a River on Mirror. A ver si Arguiñano le dedica un programa. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola, Roy. Lo de las "Ostras a lo hombre" me ha llegado al alma. ¿Y cómo debe preparar los capuccinos? ¿Y la besamel? Ecs. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarEsa es toda una salsa casera, hecha a mano...
ResponderEliminarUn abrazo.
ResponderEliminarGenial la tira y seguro que deliciosa la receta (la probaré). Respecto a lo otro... si la "nouvelle cuisine" va por ahí, que paren el mundo, que yo me bajo ;)
Un abrazo
Dios, qué asco...
ResponderEliminarGenial y auténtico. Tienes un montón de razón, yo porque me pierdo un gran placer, que es el queso (la alegría láctea). No hace mucho tuve un encuentro curioso con un queso— no recuerdo la variedad— donde la quesera me hizo el comentario: ”tiene más a sabor a semen”. Bueno, yo le dije—ponlo, como no es para mí…Las pictures geniales. Eres un crack, Miquel. Un fuerte abrazo
ResponderEliminar¡Uf!, no sé...cada cosa en su lugar y un lugar para cada cosa. No hace falta ponerle taaaanto amor a la cocina. Si me dan a probar ese café irlandés y, a posteriori, me entero de cuál es el ingrediente estrella, me pasa lo que al musulmán cuando reciba el jamón con lacito.
ResponderEliminarAh, y en cuanto a "ostras a lo hombre", yo hubiera llamado al plato "¡ostras, Pedrín!"
¿No me digas que las criadillas se van a poner de moda? Bueno, mientras no sean las propias...
ResponderEliminarSaludos.
Hola, Borgo, puestos a poner cosechas propias, y si la mujer del cocinero ha recién parido, hacemos una crema doble a las dos leches y la cosa queda políticamente correcta.
ResponderEliminarQé te voy a decir yo, que se aprovechan hasta mi viscoso líquido negro, pura melanina!
Genial la tira, Borgo!
Hola, Javi. Desde luego esto sí que tiene Denominación de Origen. Y económico, en eso tiene razón. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarGracias, Mara. Además el libro tiene recetas de cócteles como el 2White Russian -no podía ser otro- proteínico". Ya lo dice Roswell, no saben qué inventar. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarDvD: yo aún diría más... Dios, qué asco. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarAleister Crowley, en la Abadía de Thelema en Cefalú, elaboraba los Panes de Luz que sus acólitos tomaban a modo de eucaristía con su propio líquido seminal, mas no por método masturbatorio: según su propio testimonio, tras verterlo vía fornicación en la dama de turno, él mismo se encargaba de rescatarlo de su interior aspirando con la boca para luego mezclarlo con la harina y cocer con él las obleas. Ignoro si la receta completa vendrá en el libro que usted reseña...
ResponderEliminar¡Puaj! Seguiré comiendo en los restauantes tradicionales. Que como comiencen comienzen a patentar recetas así no salgo de casa.
ResponderEliminarSaludos
Flipante, Miquel, no sé adónde vamos a llegar, esto lo pones el 28 de Diciembre y te cuadra mejor. Me gusta tu tira pero más tu portada. Besos, Borgo.
ResponderEliminar"Ostras a lo hombre", eso me ha "matao" también a mí...
¿Esto es lo último para ser moderno? Estoy contigo, ¿¿¿semen de atún???? Los cojones, ese semen es casero, que se lo trague su dueño. Puaj. Ni loca.
ResponderEliminar1besico!
Hola, J.C.Alonso. Curiosa forma de vender un queso. Siento lo de tu intolerancia a los lácteos pero me alegra mucho que te gustaran los dibujos. Abrazos. Borgo.
ResponderEliminarHola, Sicoris. Yo habría elegido ya puestos el White Russian como el "Nota" de la película "El gran Lebowsky". Qué buena idea lo del Ostras Pedrín, si traducen el libro se lo propondré a la editorial (y de paso que me encarguen la portada) Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola, Licantropunk. Lo de las criadillas propias parece cosa de el Canibal de Rottemburgo ¿recuerdas? el que convocó por internet voluntarios para zamparse su propio pene. Hay gente para todo. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola, Kalamar. Pues me encanta el nombre de ese plato "A las dos leches" ¿Acaso no hay espárragos a las dos salsas? Esa bolsita de tinta es deliciosa, yo la aprovecho cuando preparo sepia con allioli. Lástima que esa tinta no sirva para dibujar. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarGracias, Abuelito, por otro de sus interesantes datos. Me fascina la figura de Crowley y he leído mucho sobre él pero desconocía sus habilidades reposteriles y aunque he visto ese libro por encima sólo recuerdo un postre, el flan de caramelo de la portada. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarAlimaña, un consejo: no comas en un restaurante en el que te hayas enemistado con algún camarero. La de escupitajos que he visto en la cocina sobre platos de clientes que nos caían gordos (Pues sí, y sé de buena tinta que lo hacen hasta en restaurantes de lujo) Cualquier día veremos un libro titulado "La cocina del regalito", más o menos lo que hace ese Photenhauer, hasta tiene nombre de mad doctor. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarJajaja… Lo cierto es que, yo, al igual que Maitena –que a mí (personalmente) me recuerda a los platos “Maizena” con “Nutricia” que me “papaeaba” de baby- no probaría esas exquisiteces…
ResponderEliminar¿Será que el semen se me antoja pastoso, o que esos de tragarse el de cualquiera, no me apetece? Saludos
Ann@
Gracias, Clementine. ¿Te imaginas que pides en el restaurante las Ostras a lo Hombre y te dicen que vendrá el chef a darle su toque personal? Puaj. Sí que probé la Ostra Voladora en un bufet con alumnos de la escuela de Ferrán Adrià: un vaso con una ostra flotando en una nube de helio rodeada de gelatina de menta. Asqueroso. A mí que me den una buena tortilla de patatas. Besos. Borgo.
ResponderEliminarHola, Fiona. Me enseñaron un frasco diminuto con esperma de atún importado de Japón: 300 euros el decilitro. No me extrañaría que el chef recurra a otro esperma más asequible. Ah, además sabía a rayos, como a pescado pasado. Besicos! Borgo.
ResponderEliminarHola, Ann@. Pues una amiga mía que me encontré en la presentación me dijo: "Yo soy una persona formal y no me tragaría el semen de alguien al que ni siquiera me han presentado antes" Me pareció una frase muy buena y si fuera el autor del libro la tendría en cuenta. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola Borgo! ¡De que cosas se entera una! No soy yo partidaria de estas recetas tan ¿modernas?;ahora bien si es bueno para aumentar la tersura en la piel, o para rejuvenecer me lo pensaría; ya sabes para lucir hay que sufrirjajajja
ResponderEliminarNo són plats que em menjaria en un restaurant. El que diu la teva amiga és una qüestió de principis: t'han d'haver presentat el donant. Això o instaurar una denominació d'origen que ens permeti tenir controlats els donants.
ResponderEliminarAra, com a cuina casolana no et dic que no: entre amics, en família...
A més, que te la mamin o mamar-la abans de menjar resulta un bon aperitiu.
A veure quan un receptari amb el cony com a protagonista. M'ofereixo com a tastador i testador.
Molt bo el senyor alcalde!
Puaj - vaya tela. Con lo rico que está el aceite de oliva. Saludos para Maitena, sus mujeres alteradas son geniales. Y también para usted claro.
ResponderEliminarQue fuerte!
ResponderEliminarRecuerdo en los cutre-programas de Pepe Navarro, en donde una mujer contaba que hacia buñuelos con el semen de sus amigos....
El semen de atún, lo he probado. Me costó, pero tengo que decir que estaba bastante bueno. Fue en el estupendo restaurante "EL Campero" de Barbate, Allí hacen unas "Piruletas de huevas de leche", que están francamente buenas...
Saludos
Jajajajaa, hostias miquel, qué bestia eres, jajajaja, pobres cocineros mamporreros. Espero que su jornada laboral no sea de 8 horas y si lo es, espero que puedan prejubilarse a los 40 años. Me encanta el pollo Strogonoff, yo lo hago fatal, pero lo hago.
ResponderEliminarTodos los quejicas lloran cuando les hieren sus sentimientos. Sisebuto es un hombre materialista, como yo.
Hola, SqS. Yo tampoco soy muy partidario de esas marcianadas culinarias. Lo de la tersura en la piel ya es otra cosa, Cleopatra ya sabía de esas propiedades y tenía a sus sirvientes para que le facilitaran materia prima. Besos. Borgo.
ResponderEliminarAixò, Enric, no són plats de gust. Et propossaré a les editorials per fer un llibre: "La cuina del parrús" i m´ofereixo a il.lustrar la portada. Salut. Borgo.
ResponderEliminar¿Qué tal, RAFA V? Paso los saludos a Maitena que además de excelente dibujante es una gran persona con mucho sentido del humor. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarOstras, Noddles, pues sí que debían ser animadas esas merendolas con esa señora y sus amigos. Me alegra que tu experiencia con el semen de atún fuera mejor que la mía, a mí me pareció con un desagradable regusto a aceite de higado de bacalao. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola, Mr. Lombreeze. Ya es agotador trabajar en una cocina corriente no quiero ni pensar si has de hacer "servicios especiales" como este. Se debe quedar uno como un higo seco en cuatro días.
ResponderEliminarSisebuto es un rompe-tabúes, un auténtico iconoclasta. Ya me gustaría tenerlo de alcalde en mi pueblo. Saludos. Borgo.
Hombre... Lo de los cerebros tenía un pase, pero me da a mi que con esto no me atrevo, ja, ja, ja!!!
ResponderEliminarJa, ja, Lazoworks, vuelvo a decirte lo mismo que con los cerebros: ¡No lo intentes en casa! Saludos. Borgo.
ResponderEliminarCreo que paso... esas recetas no me apetecen demasiado.
ResponderEliminarSabes, en Londres hay una heladería en la que hacen los helados con leche materna, esta en el Covent Garden, pero es demasiado ;)
Un abrazo.
Ays!! Ays! Ays!!
ResponderEliminarGenial la tira Miquel y la receta (la tuya) de la que he tomado buena nota!!
Un abrazo
Hola, Humberto. He leído algo sobre esa heladería, creo que se llama Milkway. Lo cierto es que eso de los helados con leche materna me parece algo retorcido. Abrazos. Borgo.
ResponderEliminarGracias, deWitt. Ya me contarás qué tal te ha salido el Strogonoff. A veces le añado un chorrito de vermut negro, creo que le da un toque bueno. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarMr. Borgo, la tira, como siempre de diez, un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Belknap. Ese fue mi primer personaje fijo en cómic, lástima que el fanzine Tijuana sólo sobreviviera siete números. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarTe gràcia. És aquell ingredient secret que ningú explica, no? Jajaja. Una abraçada.
ResponderEliminarSi, Jordicine. Si menys no, el toc personal del xef. Abraçades. Borgo.
ResponderEliminarOstres, yo no pruebo una receta de semen ni loco, por favor! Pero si que leí hace años que hay mujeres que les gusta i daban consejos de que comer para que tuviera mejor gusto...
ResponderEliminarpor cierto, el comic del alcalde buenisimo
Hola, Aris. Este libro aconseja comer según que cosas el día antes para que el semen tenga un gusto más apropiado: beber café el día antes de preparar salsa barbacoa y comer apio y tomar coca cola el día anterior de hacer un postre. Curioso. Me alegra que te guste el cómic. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarHola Borgo! A parte del tema espermático...excelente viñeta, pero que excelentísima...Un abrazo. Todavía esbozo una sonrisa mientras acabo de escribir esto :)
ResponderEliminarGracias, Vicror y yo encantado de seguir viéndote por aquí de vez en cuando. Saludos. Borgo.
ResponderEliminaryo tengo entendido que las ostras con semen son muy afrodisiacas para la mujer.
ResponderEliminarHola, Anónimo. Pues habrá que probar eso algún día aunque es curioso: creo que todas las mujeres (o casi) que he conocido aborrecían las ostras. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarlo ultimo que que me entere era de ostras con semen en la alta cocina,lo que no sé es que clase de semen si de toro o de tio.
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