Ya pasó Semana Santa, que para mí es tan evocadora de la
infancia como para otros la Navidad. Recuerdo las exquisitas torrijas que hacía mi abuela
de Almería por esas fechas mientras hacía solitarios y cantaba esta copla que
no sé de dónde la sacó:
-¿Pero qué pintan aquí los pechos? –se preguntarán. Bueno, unos
días antes de Semana Santa fui con mi hijo Dani a una feria de Vila-Seca. Marc,
el hermano mayor de un amigo de Dani, trabaja en la atracción El minero del
Far West y nos había regalado pases. Recordaba a Marc del décimo cumpleaños de mi
hijo, el ahora fornido adolescente parecía entonces un chico desgarbado rodeado
de lémures; y es que los niños de diez años parecen lémures: todos ojos y
manos.
Esa atracción es como una pequeña montaña rusa donde montas
en unas vagonetas que parecen troncos que se deslizan velozmente por unos
raíles. A un lado de la bajada más pronunciada hay una máquina que retrata a la
gente aullando mientras caen a toda pastilla. La máquina está conectada al
ordenador del recinto y cuando termina el trayecto puede uno recoger la foto por
tres euros.
-Lo siento –nos dijo Marc apoyado en el mostrador-, la
dirección ha decidido retirar la máquina de fotos.
“Anda ¿Y cómo es eso?”, pregunté. “Por la moda del Boobs Off”, respondió Marc. “¿Uuuuh?”…
Marc nos lo explicó: Boobs Off significa literalmente “pechos
fuera” y es una costumbre importada de los parques de atracciones
estadounidenses. Cuando una vagoneta llega a la zona de la foto, algunas chicas
se levantan la camiseta y enseñan las tetas a la cámara.
-Este verano pasado nos encontramos con bastantes fotos con
adolescentes practicando el Boobs Off –aclaró Marc-, la dirección dijo que aquello
no era apropiado en un parque familiar y por eso no hay fotos. Si queréis, os
regalo un llavero.
CENA A CIEGAS
También por Pascua probé una curiosa experiencia en el
restaurante Dans le Noir, en Barcelona. Un local donde se cena completamente a
oscuras, atendido por camareros invidentes. Bueno, guías más que camareros.
Al entrar hay que dejar las pertenencias en una taquilla
(móvil, reloj, bolso…) Un camarero se presentó: “Hola, soy José, uno de los
camareros. No hay cafés ni bebidas calientes por seguridad. Una vez dentro,
procuren no hacer gestos bruscos ni se desplacen solos, llamen al guía por su
nombre si necesitan levantarse. Ahora pónganse en fila, la mano izquierda sobre
el hombro de la persona de delante…”
Descorrieron la cortina negra y el trenecito humano fue
tragado por la oscuridad.
Todo estaba preparado para ser comido con las manos. Había
bricks de pasta, terrinas con paté –o algo parecido- y un delicioso coulant de
chocolate.
Ya digo, una sensación curiosa, divertida y además, fácil de
dibujar.
Ni sabía que en España existiesen restaurantes así, creía que era invención los guionistas de CSI.
ResponderEliminarParece mentira que con lo puritanos que sin los americanos luego hagan tonterías como eso de enseñar los pechos en parques de atracciones
Mr. Borgo, cosa simpatica esto del boobs off, que pena que hayan retirado las camaras; en cuanto a lo de los restaurantes tan particulares estos, yo ya habia escuchado sobre ellos, aqui en capital federal hay uno y por mi parte no entiendo quién puede querer parecerse a un ciego, pero es mi opinion, despues cada cual que haga lo que quiera, para parejas en reconciliacion estan muy bien. Cordiales saludos y como siempre es un gustazo leer su blog.
ResponderEliminarPechos fuera!!!! No se por qué viene a mi mente el recuerdo de la serie de dibujos animados Mazinger Z y su alter ego femenino la robot Afrodita. Ja, ja, ja ...
ResponderEliminarMiquel, qué entrada más divertida, empezando por la copla de tu abuela, jajajajaja... Y toda ella con dibujitos, ¿el del "ñam, ñam" también es tuyo?
ResponderEliminarNo hará falta que te diga que no iría contigo a ese restaurante a oscuras ¿verdad? porque si encima no puedo ver lo que fueras a pedir... :) Besos, Borgo, y feliz fiesta de hoy, puente largo, finde próximo... lo que sea, pero feliz :)
No se, no se, a mi eso de no ver lo que como no me termina de convencer, supongo que en la cocina tendrán luz, me gustaría ver al Chicote en uno de estos.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarCuando aún no se llevaba lo de sacarse las domingas, intente tocarle los pechos a mi chica en ese punto de la montaña rusa, pero me pilló y se puso a la defensiva y no pude. Me ha encantado la copla de tu abuela.
ResponderEliminarBuena entrada. Me he reido mucho.
Saludos
Hola, Chechu. Recuerdo ese capítulo del CSI, creo que era el de Nueva York con Gary Sinise, pues en esa ciudad hay uno de esos locales.
ResponderEliminarEn los USA se hacen tonterías como en todas partes, pero ¿porqué será que aquí las copiamos? Misterio.
Saludos. Borgo.
Hola, Mr. Belknap. Lo que es seguro es que a los del parque no les ha hecho mucha gracia, ganaban bastante dinero con las fotos. Me imagino un hombre con gabardina vendiéndolas clandestinamente como en los años cincuenta.
ResponderEliminarSegún estos restaurantes, la idea es agudizar los otros sentidos: tacto, gusto, apreciar texturas... ellos no lo llaman cenas (hablé con el encargado) sino "experiencias".
Saludos y gracias por pasar por aquí. Borgo.
¿Qué tal, Conde? Claro, es todo un homenaje-guiño a los entrañables personajes de Go Nagai, que descubrí una Semana Santa con TV en blanco y negro.
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
Hola, Clementine! Mi abuela también decía: "¡Mi nietecico zerá artita y ganará má dinero que Picazo!" Adivina en qué se equivocó...
ResponderEliminarEl dibujo es de la Warner, son los ojos del pato Lucas, tenía el día vago.
No te dicen lo que van a servir, quieren que lo descubras por ti mismo. Lo que no conseguí saber es si el vino era tinto o blanco debe faltarme olfato.
Gracias y que tengas un muy buen y largo fin de semana. Borgo.
Hola, Sonja. J, ja... lo que me gustaría ver allí a Chicote a ver cómo se las arreglaba. ¿Se movería con un candelabro como los mayordomos de las pelis de terror?
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
jejeje fácil de dibujar, seguro. Muy ionteresante resulta el Dans Le Noir. Tenemos que ir un día. También resulta interesante la moda Boobs off...jeje Aquí en el Parque de Atracciones de Zaragoza, donde hay una atracción similar, nunca han hecho nada parecido... Serán más sosillas por aquí jeje Me ha encantado la viñeta con la que abres el post. Eso de "esto lo dibujaré cuando inventen los blogs" está muy bien. Te has dibujado muy bien de niño...tienes cierto parecido. Abrazos, amigo.
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ResponderEliminarHe leido lo de "Pechos" y he tenido que entrar. Lo del "Boobs off" es verdad que de todas formas se practica en los conciertos de Rock desde hace tiempo.
Había oido lo de ese restaurante a oscuras. Curiosísimo. La próxima vez que pase por Barcelona tengo que ir.
Hola Miquel
ResponderEliminarLo primero pedirte perdón: mediatizado por el titulo -también pensé en Afrodita A- creí que eras tú el de los solitarios. Ya con la viñeta caí del guindo.
Será que la necesidad empuja a la imaginación pero yo no hubiese cerrado el puesto de fotos, yo veo negociete. Se venden copias de las fotos, al azar y en sobre cerrado, y se premia con txotxona -o similar- al que vuelva con la foto autográfiada por los protagonistas ¡¡A ver quién tiene LoLas!!
Enhorabuena por las entradas y los dibus.
Un saludo. Manu3l.
¡Menuda tontería! ¿Qué hay más familiar que unas tetas?
ResponderEliminarHola Miquel!! Qué risa la canción de tu abuela. Mi madre todas las Navidades no "deleita", con un villancico muy particular : San José Bendito, como te apañaste "pa" cortarte un "güevo" con los alicates jajajaja, ¡qué vergüenza!!
ResponderEliminarVaya modas las de las adolescentes actuales. No entiendo "na"
Muy interesante la experiencia del restaurante todo a oscuras. Me encantaría ir .
Un besazo y muy buen finde!!!
ja ja muy bueno lo del "bobs fuera"
ResponderEliminarEn cuanto al restaurante este a oscuras, puede estar muy bien para llevarte a un ligue allí, da para que hagas un relato de los tuyos.
El camarero es Psicokiller, no veas que cangueli.
salut!
Hola, León. Pues cuidaddo que esa acción puede quedar inmortalizada por una cámara. Yo soy muy miedoso en las montañas rusas y no podría estar por las domingas de nadie.
ResponderEliminarMe alegra mucho que te hayas reído, es lo mejor que me pueden decir de una entrada.
Saludos. Borgo.
¿Qué hay, Marcos? Sí, un local interesante y sobre todo, original. El precio es un poco alto, imagina si además pudieras ver lo que comes...
ResponderEliminar¿Así que por Zaragoza no se practica el Boobs Off? Quizás allí no siguen tanto las tendencias que vienen de los USA. De pequeño no tenía dotes de vidente -me habría gustado- pero sí tengo una foto en la que me basé para el dibujito.
Abrazos! Borgo.
Ja, ja, Wolfville... no hay nada como esas palabras para captar la atención. Como los que ponen los títulos a las películas. Sí, se practica en los conciertos y es una especie de saludo entre las moteras, o eso dicen...
ResponderEliminarTe recomiendo la visita al Dans le noir, es una experiencia que no deja indiferente. Avísame si pasas por Barcelona.
Borgo.
Hola, Manu y muy bienvenido a Borgo. Los que ya tenemos una edad captamos el guiño.
ResponderEliminarPues no sería mala idea lo de la foto con premio, se podría hacer algo parecido a "Miss Boob Off", con peluche y pases gratis.
Muchas gracias y saludos.
Borgo.
Impresionante la cancioncilla de tu abuela jajajaja, las abuelillas de la época tenían un repertorio que ríase usted de los Beatles.
ResponderEliminarY me parece fatal que quiten las fotos domingueras, ya que lo normal es que no hagan daño a la vista.
Saludos
No sabía que las adolescentes hacían eso, pensaba que era una costumbre de la guiri borracha pero ya se ve que todo se copia, que poca pechonalidad...
ResponderEliminarLo de comer a oscuras tiene que ser toda una experiencia, ¿y así sabe mejor la comida, el sentido del gusto y el olfato se agudiza?
Me han encantado las viñetas y las anécdotas.
:D
Hola, Enric. Pues es una buena respuesta. Lástima que no se me ocurrió cuando estaba en el parque.
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
Hola, SqS! Ostras, tienes que enviarme la letra completa de esa canción. También decía mi abuela cuando perdía algo aquello de: "San Honorato, por los cojones te ato y hasta que no lo encuentre no te desato."
ResponderEliminarCuriosas modas teenagers y también ese restaurante.
Besos y que tengas muy buen finde!
Borgo.
Eso del restaurante a oscuras lo vi en la peli "Cuestión de tiempo" y pensé que era cosa del guionista, no imaginé que existiese de verdad.
ResponderEliminarSobre lo del parque de atracciones, entiendo su postura, pero deberían replanteárselo, a los niños les agrada.
Muy bueno el primer dibujo de tu abuela ;P
Eso del restaurante a oscuras lo vi en la peli "Cuestión de tiempo" y pensé que era cosa del guionista, no imaginé que existiese de verdad.
ResponderEliminarSobre lo del parque de atracciones, entiendo su postura, pero deberían replanteárselo, a los niños les agrada.
Muy bueno el primer dibujo de tu abuela ;P
Hola, Aris. Ostras, pues eso de un psico-killer que se cuela en uno de esos restaurantes a oscuras... ¡es estupenda! En Hollywood te la compran fijo, de momento a ver si la uso para un relato.
ResponderEliminarGracias y saludos. Borgo.
Vaya, para una cosa buena que tenía el parque de atracciones (jaja)
ResponderEliminarLo de los restaurantes a ciegas...mmm... yo es que soy de esos a los que les entra la comida por los ojos.
Un saludito.
Hola, Alimaña. Más bien su repertorio era el de las Supremas de Móstoles.
ResponderEliminarClaro, pero ya sabes que son tiempos de corrección política, además lo que asustaba a los del parque es que algunas chicas fueran menores de edad. Bueno, eso y los abogados.
Saludos. Borgo.
Entre la censura en el parque de atracciones y la falta de luz en el restaurante, no hay modo de alegrar la vista. Espero que el cocinero no fuera ciego. Saludos.
ResponderEliminarJajajaa, la cancioncica del nazareno es la primera vez que la oigo! Lo de los restaurantes esos ya lo había escuchado por ahí, pero no me atrae mucho la idea, me gusta ver lo que me como y acercarme a la comida con todos mis prejuicios, jajajaj.
ResponderEliminarEntre las de Femen y esto creo que hay sobredosis de tetas. Los hombres deberíais empezar a enseñar algo para compensar ;)
Un abrazo
Muy buena entrada, Borgo. No sabía lo de la montaña rusa, ja: me mareo en una calesita (carrousel), así que imaginate el miedo que me da subirme a una. Curioso lo del restaruant a ciegas, asimismo.
ResponderEliminarLas ilustraciones, geniales como siempre.
¡Saludos!
Hola, Ana. Sí, eso de las adolescentes levantándose la camiseta recuerda a las fiestas nocturnas de Lloret con guiris y mucha sangría.
ResponderEliminarLo de comer completamente a oscuras agudiza los sentidos, es cierto: el sabor, el olfato, se aprecian más las texturas...
Me alegra de verdad que te gusten las viñetas.
Saludos. Borgo.
De las torrijas de la abuela,pasando por una tetas en la montaña rusa y acabando en la oscuridad... todo esto es maravilloso:pasado,memoria,presente que ya es pasado,más tetas, en fin.
ResponderEliminarAbrazos,amigo
Hola, Doctora. Ya ves que sí existe y en Barcelona se abrirá uno de la cadena Silent donde dejas el móvil al entrar y está todo el mundo en silencio mientras come, como un comedor trapense.
ResponderEliminarGracias y ¡Muy bueno ese enlace! Un momento que el nene no olvidará.
Saludos. Borgo.
Hola, David. A lo mejor tienen un servicio clandestino a domicilio de fotos Boobs-Off, quien sabe. Tendría más éxito que el Terra Mitica.
ResponderEliminarSí, echas de menos el no ver la comida con lo mucho que cuidan la estética -a veces demasiado- los cocineros actuales.
Saludos. Borgo.
Hola, Ricard. Pues he visto hace poco un documental sobre un cocinero ciego de Tokio, de los mejores del mundo, pero espero que no lo pongan a preparar ese pez venenoso, el Fugi. Habrá que alegrar la vista de otra manera, qué le vamos a hacer.
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
Hola, Mara. Yo tampoco la he vuelto a oir, pero lo que me gustaría recuperar es su receta de torrijas, las mejores que he probado.
ResponderEliminarLa vista es muy importante para que un plato te seduzca. Nada más apetecible que una paella con sus crustáceos y su arroz doradito.
Pues en Vendrell (Tarragona) hay una cafetería atendida por chicos en tanga. Te pasaré la dirección si quieres. Para tomar el cortado y el croissant alegrando la vista.
Abrazos. Borgo.
Hola, Juan Esteban. A mí tampoco me entusiasma la montaña rusa. La verdad es que me alegré cuando me dijeron que no habían fotos, normalmente siempre quedo muy mal, sobre todo cuando estoy bajando en vagoneta a toda velocidad con el estómago en la boca.
ResponderEliminarGracias y saludos.
Borgo.
¿Qué tal, Francisco? Gastronomía, locales fashion y tetas. Buen cóctel. Viene a ser más o menos lo de las revistas de tendencias.
ResponderEliminarAbrazos! Borgo.
Jajajaja, una montaña rusa con final feliz!!!
ResponderEliminarHola, Cahiers. Muy bueno, con final feliz... Stephen King hacía decir esto a uno de sus personajes: "Un orgasmo es como un buen estornudo al final de un viaje por las montañas rusas". Creo que en "Salem´s Lot".
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
Para mí, sin embargo, lo de subir a una montaña rusa está muy lejos de un orgasmo. Sólo lo hice una vez, y esa sensación estomacal fue horrorosa. No soporto ni la noria.
ResponderEliminarHola, Cahiers. Pues ya somos dos. Tendría que ver el careto que hago con esas fotos que te hacen bajando la montaña rusa. De pequeño me subí justo después de comer helado de pistacho y... bueno, mejor no lo cuento.
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
Qué buena la primera ilustración, jejejeje. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarY lo del restaurante a oscuras es la mar de curioso. Claro, yo lo primero que pensaba es cuando hubiera sopa, la emoción se multiplicaría o el pescado con sus raspas traicioneras... Eso si, al privar al cuerpo del sentido de la vista, el del gusto saldrá favorecido y la comida sabrá más. Me gustaría ir algún día.
Un saludo.
¿Qué tal, Charly? Me alegra que te guste el dibujito. Sí, lo de comer completamente a oscuras es curioso, de hecho los del local lo llaman "experiencia" en lugar de cenas. Los otros sentidos se acentúan y todo está preparado para comer sin necesidad de cubiertos. Han tenido éxito y piensan abrir más restaurantes de ese tipo en España.
ResponderEliminarSaludos. Borgo.