jueves, 30 de septiembre de 2010

EXTRAÑOS EN UN BAR


Ayer, día 29, estaba en mi bar habitual viendo el partido Barça-Rubin Kazan. Justo después de empezar el segundo tiempo entró en el bar un hombre de aspecto nada llamativo: delgado, fino bigote castaño, camisa clara y pantalón oscuro. Este hombre anodino pasó a convertirse en una rara avis: mientras los parroquianos no apartaban la vista de la pantalla siguiendo las evoluciones de Iniesta y Messi él nos daba la espalda examinando la lista de bocadillos colgada en la pared. Se tomaba su tiempo, ajeno al partido, mientras su indice dibujaba una imaginaria línea entre en nombre del bocadillo y el precio. "Debe ser un turista" pensé al ver su desinterés por el encuentro a pesar de que no llevaba cámara, ni un plano de la ciudad ni nada que le delatase como extranjero.
Y fue entonces cuando me llegó una de mis extrañas asociaciones de ideas. Me acordé de aquella ingeniosa escena del partido de tenis de Extraños en un tren (1951) cuando Guy (Farley Granger) distingue entre el público a Bruno (Robert Walker) Es la única cabeza que permanece inmovil sin seguir el movimiento de la pelota.



A Patricia Higsmith, autora de la novela, no le gustó la película de Hitchcock; especialmente por su suavizado final al gusto de Hollywood y en eso estoy de acuerdo con ella. Ahora que la censura se ha relajado me gustaría ver como su novela es llevada al cine de una manera más fiel aunque Extraños en un tren de Hitchcock tenga momentos tan buenos como este.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

LA FRASE DE LA SEMANA

"AMANECER ZULU" (1979)


-Las balas se acaban... pero las lanzas,no.
Bloomfield (Peter Vaughan) furriel encargado de la munición al darse cuenta de que los zulúes los van a escabechinar.
Amanecer Zulú muestra la Batalla de Isandhlwana (enero 1879) En este valle de la Nación Zulú el general Lord Chelmsford ordenó levantar un campamento con 1.200 soldados británicos y 300 auxiliares nativos. Chelmsford regresó al puesto de mando sin ordenar fortificarlo ni situar centinelas en las colinas pues no creía que los zulúes atacarían el campamento.

Al día siguiente -23 de enero- 22.000 guerreros se echaron encima de los defensores de Isandhlwana. Un par de horas más tarde todos los soldados habían sido aniquilados. Los zulúes abrieron sus cuerpos en canal con las lanzas para liberar sus espíritus impidiendo que pudieran volver para vengarse. Lord Chelmsford murió 25 años después de una manera más plácida: un ataque al corazón mientras jugaba al billar en el club de oficiales.

lunes, 27 de septiembre de 2010

COSAS DE DIBUJANTES



Ayer fui a ver El gran Vázquez de Óscar Aibar, autor de la interesante Platillos volantes. Me ha gustado mucho, la verdad. Santiago Segura cumple correctamente aunque el gato al agua se lo lleva Álex Angulo en su papel de odioso chupatintas. Soberbia la caracterización de Manuel Solo como Ibáñez (¡es él !!!)y una escena para destacar: cuando la esposa de Vázquez -Mercè Llorens- se encuentra con la otra esposa, un hijo y una jaula con un loro; la contraseña que Vázquez usaba también con ella para eludir a los cobradores.
Me pareció acertada la imagen que se da en la película a la Editorial Bruguera. Exprimian a sus dibujantes pero también acogió a muchos represaliados del régimen franquista como Escobar, autor de los Zipi y Zape, condenado a muerte en el 39 por haber sido funcionario de la República. Salvando las distancias podríamos decir que el señor Bruguera fue un Schindler a su manera.

Solía ver a Vázquez en el barcelonés Bar Raval donde se reunían los autores de la desaparecida revista Makoki en la que Vázquez colaboraba y donde publiqué unos cómics de los que ahora no me siento muy orgulloso. Un día no me resistí a preguntarle cuál era su personaje preferido. Se tomó unos segundos antes de contestar mientras yo apostaba conmigo mismo: ¿Anacleto, Hermanas Gilda, Tío Vázquez? pero me dijo que sentía un cariño especial por Angelito, un niño que viaja con media cáscara de nuez y siempre dice Gúgú en la última viñeta. Su personaje más surrealista y aparentemente más alejado de su autor.
- Un crío sin padres que va a su puta bola -Me dijo Vázquez- ... No comprendo como en Bruguera me lo aceptaron.

LA DAMA DE BLANCO


Cachis la mar. Me alegré mucho cuando la pequeña editorial Castillo de Otranto especializada en clásicos de la literatura fantástica me encargó la portada de La dama blanca; uno de los más interesantes y enigmáticos relatos victorianos de fantasmas. Cuando estaba todo a punto para enmaquetar, el editor inglés propietario de los derechos decide no cederlos y la novela no se publicará. Suerte que los de Castillo de Otranto me pagarán igual porque me han hecho cada pufo en este oficio que parezco Vázquez... pero al revés. Bueno, al menos la portada no quedará del todo inédita si la publico en este blog. Algo es algo.
El autor, Wikie Collins, era adicto al opio y estaba convencido que le seguía a todas partes un clon suyo al que llamaba Ghost Wilkie. Fue el autor de la primera novela detestivesca La piedra lunar y la primera con un protagonista sordo: Hide and Seek.

sábado, 25 de septiembre de 2010

EL ÚLTIMO JAPONÉS EN RENDIRSE


Mi última portada (Hotel Rangoon, ambientada durante la ocupación japonesa en Malasia) me ha traído recuerdos de cuando era niño. Entonces había un goteo constante de noticias en los periódicos sobre el hallazgo en alguna de las 11.000 islas del frente del Pacífico de un soldado japonés aislado desde la Segunda Guerra Mundial. No sabían que el conflicto había terminado o se mostraban escépticos del desenlace.

El último caso fue el del teniente Hiro Onoda oculto en la isla de Lubang (Filipinas) desde diciembre de 1944 y localizado en 1974. Su comandante había ordenado a Onoda y sus tres compañeros no rendirse ni suicidarse bajo ninguna circunstancia.
En diciembre de 1945 los americanos arrojan octavillas sobre la isla anunciando el fin de la guerra. Onoda y sus hombres deciden que se trata de un montaje. Tampoco se convencen cuando años más tarde un avión les arroja un paquete con fotos de sus familiares.

La patrulla de Onoda prosigue con sus actividades de guerrilla y hostigamiento. Uno de los soldados muere en un tiroteo con el ejército filipino cuando incendiaba un granero. Los otros compañeros de Onoda cayeron en sucesivas escaramuzas. En 1972 Onoda se había quedado solo y sin olvidar la prohibición de rendirse o suicidarse. Permanecía oculto en la jungla con una dieta a base de mangos, cangrejos, camarones y ratas. Sentía predilección por estas últimas, sobre todo el hígado.
El 20 de febrero de 1974 Onoda se encuentra con un aventurero de Osaka, Norio Suzuki, que se había propuesto encontrar antes de fin de año al yeti y a un soldado japonés perdido en una isla del Pacífico. Suzuki le aconseja entregarse pero Onoda responde tajante: “Solo obedeceré a mi comandante”. A su regreso al Japón Suzuki localiza al ex comandante de Onoda –ahora trabajando de librero- que se desplaza en avión a Lubang donde se encuentra con Onoda y le ordena oficialmente rendirse. El teniente lloró al entregar su sable, rifle, unas 500 balas y un par de bombas de mano.

Esta imagen es de cuando Onoda descendió del avión que le trajo de vuelta al Japón.Sus primeras declaraciones fueron: “Siento vergüenza por estar vivo”.

viernes, 24 de septiembre de 2010

EL DIÁLOGO DE LA SEMANA


"LA INVASIÓN DE LOS ULTRACUERPOS" (1978)

Donald Sutherland, en el papel de un inspector de sanidad, está examinando la cocina de un restaurante francés. Coge algo con unas pinzas y se lo muestra al maître.
Sutherland: ¿Qué es esto?
Maître: Una alcaparra.
Sutherland (impasible): Es mierda de rata.
Maître: Mais non, monsieur. Es una alcaparra.
Sutherland: ¿Seguro?
Maître: Oui, monsieur.
Sutherland: Bien, pues... ¡Cómasela!


En esta película tenían un cameo el recientemente desaparecido Kevin Mac Carthy y Don Siegel, director de la primera versión. En el reparto se veía a Leonard -Spock- Nimoy que dirigió algunas escenas, Jeff Goldblum (¿qué habrá sido de él?) y Veronica Cartwright, una de las tripulantes del Nostromo, la nave de Alien.

martes, 21 de septiembre de 2010

NO ERA FESTIVO EN SEATTLE


Magenta y Púrpura se abrazan al encontrarse en el aeropuerto.
-Perdona que no te haya traído un regalo –dice Magenta entre dos besos-. Ya sabía que ayer fue tu cumpleaños pero era día festivo en Seattle y todo estaba cerrado.
-Da igual –dice riendo Púrpura- . ¿Te apetece cenar en un restaurante griego?
Magenta advierte una expresión de felicidad bovina que Púrpura muestra siempre que está enamorada y así es: “He conocido a un hombre que no parece de este mundo –da un giro al volante y:- Es guapísimo, atento… mañana he quedado con él para tomar una copa. Podrías venir tú también y lo conocerás.”
Cuando Púrpura levanta la vista del menú hasta sus ojos parecen casi glaucos a la luz de la lamparita de la mesa. Magenta se da cuenta de lo mucho que se ha americanizado al pasar el tenedor de la mano izquierda a la derecha para comer su musaka. Púrpura sigue hablando de Glauco. De vez en cuando la mira y sonríe pero Magenta no le devuelve la sonrisa. Ya está ligeramente aburrida pero aún siente un ramalazo de culpa por no haberle traído un regalo. Lo fue dejando para más tarde y al final se encontró con el tiempo justo para tomar el avión. Era mentira lo del día festivo en Seattle. Al llegar los postres (baklava para Magenta y un té para Púrpura que siempre cuida su línea cuando está colgada por alguien) ya está claro que el diálogo que esperaba Magenta ha resultado un monólogo sobre Glauco. Magenta responde con un silencio rencoroso cuando Púrpura dice que va al lavabo; eso siempre quiere decir que no volverá antes de quince minutos.
Poco después suena el móvil que Púrpura ha dejado sobre la mesa –nunca se lleva el móvil a los lavabos desde que un día se le cayó uno por el retrete-. En la pantalla iluminada se ve un número y debajo un nombre: Glauco. El volumen está alto, dos clientes la miran con desaprobación y Magenta se siente aliviada cuando el móvil deja de sonar. Recuerda que no está en Estados Unidos y pregunta a un efebo de Corfú vestido de camarero:
-¿Se puede fumar?
-¡Claro! Ahora le traigo un cenicero.
-Great! –dice Magenta aún bajo la influencia de Seattle. Mientras busca el tabaco en su bolso vuelve a oír el móvil: un mensaje de texto. Magenta sabe que lo que va a hacer es incorrecto pero Púrpura le debe una por la aburrida velada y la espera. Lee:
Púrpura, se acabó. Es mejor así. No eres la persona que yo había imaginado. Eres posesiva y manipuladora. Me has decepcionado mucho. Adiós. Glauco.
Magenta pulsa la tecla de borrar. Luego busca el registro de llamadas y borra el número de Glauco. Magenta sonríe, ahora ya tiene un regalo para Púrpura: unas horas más de bovina felicidad.
Happy Birthday.

lunes, 20 de septiembre de 2010

LAS MELLIZAS: GANADORAS




Bueno, pues las claras ganadoras de la votación han sido las mellizas Collison seguidas de Ingrid Pitt (no incluída en mi lista, vaya fallo) las vampiras de Coppola y un recuerdo para Mathilda May de Lifeforce. No me sorprende ya que en la película Drácula y las mellizas (Twins of Evil, 1971) abundaban escenas tan turbadoras como esta de la vela:



...Y UN RECUERDO PARA KEVIN



Ha fallecido Kevin Mac Carthy, el inolvidable protagonista de "La invasión de los ultracuerpos, 1956". A la izquierda la portada que hice para la novela en la que se basa la película y sus posteriores secuelas. En la memoria de todos queda este actor gritando en medio de la carretera. ¡Están aquí! ¡Vienen a por nosotros y usted será el siguiente!!!

viernes, 17 de septiembre de 2010

¿POR QUIÉN SE DEJARÍA MORDER?

“Las mujeres vampiro son una fantasía sexual en la cual la mujer es objeto de deseo y terror al mismo tiempo: es el placer que se teme”. (Cine de vampiros de Carlos Díaz Maroto. Editorial Recerca)
Hagamos una encuesta ¿Por cual de estas criaturas de la noche le gustaría ser mordido? (o mordida, tanto da)

Para los amantes de lo clásico: la turbadora belleza de Carol Borland (La marca del vampiro 1935)bien acompañada por Bela Lugosi.


Está aquí por ser hija de quien es pero no creo que Gloria Holden (La hija de Drácula 1936) despierte muchas pasiones.


Temible la mirada depredadora de Andree Mally (Las novias de Drácula 1960)


Mary y Madeleine Collison (Drácula y las mellizas 1970) fueron las primeras mellizas que posaron para Playboy. Idénticas en todo salvo que una era vampira y la otra no.


Solo para amantes de las emociones fuertes. La boquita de piñón que muestra Amanda Bearse (Noche de miedo 1985)



Amanda Donahue (La guarida del gusano blanco 1988) a punto de culminar un baño con masaje y final feliz.




Wandesa, Darvula y Mircalla. Las draculinas del Drácula de Coppola (1992) Antes de que alguien lo pregunte Monica Bellucci es la del medio.



De nuevo el Drácula de Coppola: Sadie Frost, la impresionante Lucy Westenra. Pocas vampiras tan sensuales como ella se han visto en pantalla.


Vale, es un personaje de cómic, pero la Vampirella del gran Pepe González también tenía su aquel... y más por partida doble.

jueves, 16 de septiembre de 2010

LA CANCIÓN DEL GAVILÁN

Hoy es 16 de setiembre, Día de la Independencia de Mexico. Un saludo a todos los mexicanos que leen este blog. Voy a tomarme un tequila añejo escuchando esta canción de Pedro Infante cuya letra causa mucho regocijo en este lado del charco.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

EL DIÁLOGO DE LA SEMANA



WHAT´S NEW PUSSICAT?? (1965)

Michael James (Peter O´Toole) se encuentra con el Dr. Fassbender (Peter Sellers) en un local nocturno.
-O´Toole: Qué sorpresa encontrarle aquí, Dr. Fassbender.
-Sellers: La verdad es que le estaba siguiendo.
-O´Toole: Pero si cuando entré usted ya estaba aquí.
-Sellers: Es que le seguía muy deprisa.
What´s New Pussycat fue el debut cinematográfico de Woody Allen como actor y guionista. El director, Clive Donner, y Peter Sellers le obligaron a reescribir una y otra vez los diálogos y las escenas hasta que el resultado final no tenía nada que ver con el guión original de Allen. El cómico declaró que nunca colaboraría en ninguna otra película que no fuera él el director pero se dejo convencer por Martin Ritt para The Front (El testaferro, 1976) al saber que trabajaría con su idolatrado Zero Mostel.

lunes, 13 de septiembre de 2010

CUÉNTAME...


Dedicado a Cahiers y su blog La guarida del eremita.
Año: 1973. Ibáñez, el creador de Mortadelo y Filemón, está dedicando un álbum a un chaval de chaqueta con cuello de piel que se lo mira babeando. Ese soy yo.

Aquí está su dedicatoria. Había hecho un álbum de cómics casero y lo dejé en la Editorial Bruguera con el ruego de que se lo hicieran llegar a Ibáñez. Días más tarde recibí una carta del dibujante en la que decía que le gustaría saludarme y que me dedicaría un álbum en la presentación de "Chapeau el Esmirriau" en el Corte Inglés. No lo podía creer ¡Iba a conocer a mi ídolo! Me sentía como un hincha del Boca que está a punto de encontrarse con Maradona. Al lado de Ibáñez se sentaba Garrido, por entonces subdirector de Bruguera, que me prometió un puesto en los estudios de la editorial cuando cumpliera los catorce. La crisis que pronto acabaría con Bruguera impidió que me curtiera allí como dibujante.

viernes, 10 de septiembre de 2010

EL MÁS DÉBIL DE LA MANADA


Julius Nerd salió del after estrechando la cintura de Selene y sintiéndose más afortunado de lo que había sido nunca hasta ahora.
Por supuesto que había reparado en ella cuando entró: cabellos negro alazán, proporciones perfectas de estatua y labios tan rojos como los de una herida recién abierta. La vio recorrer el local con una mirada fugaz, como si buscara a un conocido hasta que clavó sus ojos en Julius que no daba crédito al ver aquella belleza sonriente acercarse hacia él. Julius, con sus gafas de pasta, acné persistente y camiseta negra demasiado ajustada que ponía en evidencia su sobrepeso.
Se presentaron. “Selene, Julius” y compartieron trivialidades durante un par de minutos hasta que ella, abanicándose con una mano, dijo:
-Aquí hace demasiado calor ¿Salimos a tomar el aire?
Julius se bajó –más bien saltó- del taburete y su alborozo subió unos enteros cuando Selene le rodeó un hombro con su brazo. Mientras se dirigían hacia la puerta Julius buscó con el rabillo del ojo a sus amigos para saber si le observaban. Y sí, ahí estaban, inmóviles en la pista de baile con una expresión atónita en sus caras. Julius sintió en su interior un cálido cosquilleo de placer.
Una tibia noche de verano. El cielo aún estaba oscuro pero las estrellas ya se difuminaban y una tenue luz amarillenta asomaba detrás de los edificios más altos. Se oyeron seis campanadas desde una iglesia cercana.
El pálido y serpenteante brazo de Selene se volvió nervudo y fuerte al guiar a Julius hacia el interior de un oscuro callejón. Julius se estaba preguntando qué clase de juego exótico querría practicar Selene justo antes de descubrir sus grandes colmillos hasta ahora ocultos tras el anillo rojo de sus labios. Cuando ella le sumergió en la oscuridad del final del callejón centellearon sus rojizos ojos, menos humanos que los ojos de un lobo. Imposible escapar. Ni Houdini hubiera logrado zafarse de aquel brazo gélido. Entonces Julius comprendió.
Era como aquellos documentales sobre la vida salvaje. Un león acecha una manada de antílopes, éstos corren pero siempre queda uno rezagado, el más débil de la manada, destinado a ser el alimento del león. Faltaba poco para el amanecer, Selene tenía prisa y cuando reparó en Julius supo que había encontrado a alguien que no se lo pensaría dos veces cuando le propusiera salir juntos a la calle. El más débil de la manada.
Las gafas de Julius resbalaron y se estrellaron contra el suelo cuando Selene se abalanzó sobre su garganta. Luego vino un aguijonazo extrañamente agradable y relajante. Justo antes de que la negrura engullera definitivamente a Julius éste murmuró:
-No ha sido una mala experiencia después de todo.

jueves, 9 de septiembre de 2010

AND THE WINNER IS... CHRISTOPHER LEE!


Bueno, pues la votación está muy clara: Lee es el favorito con ocho decisivos votos seguido de dos que se han decantado por Lugosi, los controvertidos Langella y Oldman han logrado un voto cada uno. Algunos no se decidían entre Lee O Lugosi -muy comprensible- y hay quien ha recordado a Schreck, Carradine, Lederer y Villarías, el Drácula de la versión hispana.
Muchísimas gracias a tod@s por participar en la votación. Ha sido muy interesante y divertido. Los comentarios, muy buenos. Si Lee se enterara de los resultados de esta votación seguro que se pondría a cantar y bailar como en esta escena de The Captain Invincible (1985)

lunes, 6 de septiembre de 2010

VOTE A SU DRÁCULA PREFERIDO

El bloguero neoyorquino Gary Parfitt propuso una votación para elegir el mejor Drácula cinematográfico y ha mostrado los resultados mediante aplausos y abucheos. La mejor ovación se la lleva Christopher Lee, de acuerdo, pero es más discutible que Frank Langella iguale su posición y que Gary Oldman se lleve un sonoro abucheo. Además, incluye a Schreck y Kinski que en realidad interpretaban a Nosferatu y omite a Louis Jourdan cuyo Drácula televisivo es muy destacable.
¿Y ustedes qué opinan? ¿A quién votarían como el mejor intérprete de Drácula?


THE VESSEL OF WRATH


Dedico esta entrada a Gloria y su blog Rooting for Laughton enteramente consagrado a Charles Laughton, un actor por el que también siento especial devoción. Le prometí que mostraría esta portada cuando la tuviera terminada, una recopilación de relatos de Somerset Maugham. El que da título al libro (El velero de la ira) fue llevado al cine con Laughton en el papel de un borrachín exiliado en una isla del Pacífico que es redimido por una misionera (Elsa Lanchester, no podía ser otra) El resto de los relatos tienen un nexo en común: el póker, una de las debilidades de Maugham. Mi preferido es el titulado “Una entre sesenta y seis mil” que es el número de probabilidades de conseguir una escalera de color.

jueves, 2 de septiembre de 2010

TERROR AÑOS 80

El Espiritu del Terror de los 80 acaba de traspasar la puerta. Tiene aspecto de vampiro posmoderno y volátil al estilo del David Bowie de El Ansia. Viste una horrible combinación ochentera: chaqueta con hombreras y pantalones de pinzas. Cuando pongo música -Road to Nowhere de los Talking Heads- oscila sus caderas, supongo que baila.

-¿Sabes, Borgo? Dicen que la música de tus 20 años es la que te gusta para siempre y esa es la edad que tenías en mi década. Entonces ibas de siniestro, enfundado en un maillot negro.
-Sí… me dejaba caer por el 666 –un local con mesas en forma de lápida-, casi al lado había un bar de punkies pero nunca hubo problemas. Nos mirábamos desde una prudente distancia riéndonos disimuladamente de sus pintas igual que ellos de las nuestras.
Por entonces vi El Resplandor. ¡Qué susto la primera vez que vi la escena de la chica que sale de una bañera y se convierte en una repulsiva bruja! A Stephen King no le gustó la película, es buena señal.
-Casi te meas del susto cuando te encargaron una portada de King.

-Pet Sematary (El cementerio de animales) Claro que era una edición de bolsillo. El nombre tenía que ocupar más de la mitad de la portada, lógico, era lo que vendía.
A principios de los 80 coincidieron tres películas que renovaron el cine de licántropos: Un hombre lobo americano en Londres, Aullidos (estas con los increíbles efectos de Rick Backer) y En compañía de lobos.
Venga, Borgo –dice el Espíritu sirviéndose un whisky-. Sigue recordando.

-En esos años algunos de mis directores favoritos nos dieron sus obras maestras: Ridley Scott con Blade Runner que es un pastiche de SF y cine negro, pero tan bueno… nunca estuvieron mejor Ford y Hauer. David Cronemberg con Videodrome, una de las películas más fascinantes que he visto. David Lynch con Terciopelo Azul… y John Carpenter del que me encantan dos de sus films menores: El príncipe de las tinieblas, con aquellos mendigos satánicos liderados por Alice Cooper, y Están vivos, la de las gafas que descubren extraterrestres; es quizás su obra más personal.
Apareció un subgénero: las películas de caníbales. Fui a ver la más famosa –Holocausto Caníbal- con unos compañeros del instituto. Uno de ellos, en mitad de una escena gore, se asomó desde el anfiteatro y gritó “¡Qué vomitooo!” y arrojó el contenido de una lata de fabada sobre los espectadores de platea. Qué caos. Los acomodadores le agarraron y vaya somanta que le dieron…
-¿Qué me dices de mis sagas?: Viernes 13, Elm Street

-Nunca me engancharon, me parecieron distraídas y punto. En cambio quisiera reivindicar Lifeforce, con sus vampiros del espacio, Mathilda May… no entiendo porqué esa película fracasó en todas partes. Oye, Espíritu… tengo que confesarte algo.
-Soy todo oídos, Borgo.
-Debo ser la única persona de todo el planeta que no ha visto entera E.T.
-¿¡Quéééé?! –el Espíritu pone unos ojos como platos de restaurante de lujo.
-No fui a verla cuando la estrenaron, y si la veo en video o por la tele siempre acabo dormido o haciendo otra cosa. Para mí es la versión en película de esos libros que se te caen de las manos…
Le estoy hablando a las paredes. El Espíritu del Terror de los 80 ya se ha esfumado dejando un rastro parecido a un ectoplasma púrpura. Quizás por el pasmo que le ha producido mi confesión. Intentaré ser más cauteloso cuando venga el Espíritu de los 90.